Ejemplo de longevidad y vitalidad en el mundo del rock, el líder de los Rolling Stones ha dejado el alcohol y las drogas, medita todos los días y hace ejercicio entre cinco y seis veces por semana
01 oct 2024 . Actualizado a las 15:35 h.A sus 81 años, Mick Jagger sigue desafiando el paso del tiempo, manteniendo la energía y vitalidad que lo han convertido en una leyenda del rock. El Rolling Stone continúa llenando estadios con una inagotable fuerza física. Lejos de bajarse del escenario, Jagger va a por más y sigue manteniendo un estilo de vida activo. ¿Cuál es su secreto?
Atrás ha quedado la época en la que frontman de la banda británica posaba en fotos a blanco y negro con cigarrillos y botellines de cerveza en las manos. Desde hace más de 25 años sigue un riguroso régimen de alimentación, ejercicio y cuidado de la salud mental que le han dado frutos. En el libro Pacto con el diablo (Temas de hoy, 2024), Isadora Puiggené detalla cómo son los hábitos saludables del músico y cuál es la rutina que lo mantiene en una forma física y mental envidiable incluso durante sus giras internacionales. Y aunque la fama y el éxito le han dejado, sin dudas, en una posición económica privilegiada, lo cierto es que muchas de las actividades que constituyen el día a día del cantante están al alcance de cualquiera.
Qué come un Rolling Stone
La alimentación de Mick Jagger está planteada con un enfoque «antiaging». En otras palabras, la dieta del músico potencia los antioxidantes y limita el azúcar, un gran enemigo del metabolismo saludable. Jagger nunca come postres ni otros alimentos con azúcar, evitándolos sobre todo durante la noche. Esto se fundamenta en el hecho de que nuestro metabolismo está más activo durante el día, por lo que los productos que ingerimos antes de dormir deben ser, dentro de lo posible, livianos, para no sobrecargarlo. Además, la mayor actividad de la digestión durante las horas de sol hace que las calorías que comemos durante el día se quemen con más eficiencia, favoreciendo el mantener un peso adecuado.
Como explica Puiggené en el libro, Jagger sigue una dieta orgánica por sugerencia de Jo Wood, la exmujer de su compañero Ronnie Wood, guitarrista del grupo. Defensora del estilo de vida orgánico, ella convenció a la banda de seguir una dieta basada en alimentos naturales: productos provenientes de animales criados en libertad, a los que no se les administran hormonas y alimentados con comida fresca y natural, sin piensos industriales con aditivos. En cuanto a las frutas y verduras, se buscan aquellas con etiqueta «Bio», que están libres de pesticidas y de fertilizantes artificiales.
Pese a que sigue este régimen estricto, el Rolling Stone no se priva de ingerir porciones de tamaño considerable. El músico afirma que come el doble que cualquier persona común y esto no es de extrañar, dado que entrena casi a diario durante tres horas y necesita combustible para poder llevar a cabo estas sesiones, sin mencionar lo que significa subirse al escenario. Se calcula que el cantante recorre más de 12 kilómetros en cada show de dos horas, por lo que come un plato de pasta antes de cada concierto para hacer acopio de energía y afrontar el desgaste de una gira.
Equilibrio emocional
Mantenerse activo y proponerse retos, a la vez que prioriza su salud mental, son claves para la motivación de Mick Jagger y él mismo lo afirma. Por eso, ha integrado el mindfulness en su vida y practica este estilo de meditación a diario. Se trata de una técnica basada en la respiración, que ayuda a la mente a focalizarse en el momento presente y minimizar las preocupaciones y el «ruido» exterior.
La meditación no solo mejora el estado de ánimo y reduce el estrés, sino que tiene efectos en la frecuencia cardíaca y en el bienestar general, contribuyendo a mejoras en otros aspectos, como el sueño. Pese a todo, mantener la constancia en esta práctica puede ser un desafío. Mick Jagger asegura que lo primero que hace cada mañana es meditar, pero no es necesario acudir a sesiones con el maestro yogi Maharishi Mahesh, como lo ha hecho el Rolling Stone en los años sesenta, ni hacer, como él, retiros espirituales en Laos. Hoy, contamos con aplicaciones que facilitan el acceso a cursos de meditación y podemos practicar cada día unos minutos.
El entrenamiento de una estrella del rock
Para mantener la capacidad cardiovascular que le permite, a su edad, actuar en vivo en conciertos de más de dos horas, Jagger entrena entre cinco y seis días a la semana. Es fiel a su entrenador personal, el noruego Torje Eike, con quien trabaja desde hace 25 años, y asegura que el ejercicio es fundamental en su rutina.
El programa de rutinas del músico incluye ejercicios de resistencia y de equilibrio, pero, como destaca Puiggené en su libro, la actividad física favorita del Rolling Stone es el baile, con sus movimientos que ya son una marca registrada. Un ejercicio que los expertos recomiendan por estimular tanto el cuerpo como la mente, al requerir una importante coordinación motora.
Otro de los entrenamientos que no faltan en la rutina de Jagger es el pilates, una actividad que fortalece los músculos y los tonifica. Pero, sobre todo, mejora la flexibilidad, un aspecto cada vez más importante a medida que vamos cumpliendo años y que contribuye a que el músico pueda subirse a los escenarios con agilidad. Con este mismo objetivo, realiza ejercicios de calistenia, orientados a poder mantenerse de pie y en actividad durante largos períodos de tiempo.
Adiós a los tóxicos
A partir de los 58 años, Mick Jagger abandonó las drogas y el alcohol para enfocarse en su salud. «Paré de festejar, paré de tomar drogas, de beber y todo eso. He cambiado mi estilo de vida para ir al escenario y actuar», dijo en ese momento.
Ya en el 2008, había afirmado que «las drogas no causan satisfacción» y, en cambio, había decidido dedicarse a cuidar de su cuerpo, algo que nunca es tarde para hacer. Y tras un problema del corazón por el que tuvo que pasar por el quirófano en el 2019 y cancelar una gira mundial, la disciplina en el autocuidado de la salud es aún más importante para el músico, por eso se mantiene firme en esta abstinencia.