El viento es el protagonista del primer e-studio del año recién estrenado

Fran Armesto

LA VOZ DE LA ESCUELA

El viento siempre se ha usado como fuente de energía, antiguamente en los molinos y hoy en los modernos generadores eólicos
El viento siempre se ha usado como fuente de energía, antiguamente en los molinos y hoy en los modernos generadores eólicos PACO RODRÍGUEZ

La versión completa puede descargarse desde la web www.prensaescuela.es

22 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Al igual que otros años, arrancamos en este primer mes del 2020 con nuevos e-studios de noticias que profesores y alumnos podrán encontrar en la web www.prensaescuela.es, precisamente en el apartado denominado así, E-studios de noticias. Y desde allí podrán descargarlos para trabajar con ellos en el aula. Se trata de materiales para la clase estructurados a partir de una o dos noticias publicadas en La Voz de Galicia y que sirven de percha para ampliar conocimientos y proponer múltiples actividades. El primer e-estudio de este año se titula simplemente Viento y está pensado para alumnos de la ESO. Su autor es Francisco Armesto, científico de los Museos Científicos Coruñeses, y lo que viene a continuación no es más que un resumen. La versión completa, en la mencionada web.

El e-studio (fragmento)

Uno de los fenómenos meteorológicos que caracteriza la temporada invernal es el viento. Con la llegada del otoño, los temporales comienzan a golpear especialmente las regiones costeras, pero también las de interior, así que, en ocasiones, la previsión aconseja cerrar parques y jardines, y mantener los servicios de urgencias en alerta. Los destrozos que pueden causar en los entornos urbanos pueden ser muy peligrosos para la personas: caídas de árboles, cornisas y grúas, levantamiento de tejados y ventanas, etcétera.

NOTICIAS

  • «Ciclón Amelie: los fuertes vientos y la lluvia dejan más de un centenar de incidentes por toda Galicia» (3/11/2019): https://bit.ly/389TmPl
  • «Rayos, apagones y rachas de hasta 120 kilómetros por hora en Galicia, que está en alerta roja» (14/11/2019): https://bit.ly/36UNd9t

En otoño supimos que la velocidad del viento en nuestro planeta aumentó un 7 % en la última década. En general, suele minusvalorarse la acción que el movimiento del aire ejerce sobre el entorno. Sin embargo, forma parte de nuestra vida cotidiana, de ahí el interés educativo que ofrece la exploración y conocimiento de su naturaleza.

Experimentar con el viento proporciona familiarizarse con sucesos sorprendentes del mundo natural que contrastan con el sentido común. El viento es un importante agente de erosión y transporte geológico, capaz de modelar paisajes y arrastrar masas de polvo y arenas, por ejemplo, desde el desierto del Sáhara hasta nuestro país. La adaptación al viento también es frecuente en los seres vivos, pues muchas plantas le confían su reproducción y la dispersión de sus semillas; también una gran diversidad de animales emplean el viento para mantenerse en el aire (aves, insectos, etcétera) o para desplazarse (pequeñas arañas, por ejemplo). Como fuente de energía se ha empleado en los antiguos molinos y grandes veleros y, actualmente, es el objetivo de los modernos aerogeneradores. El diseño industrial (coches, aviones, cohetes...) y arquitectónico (puentes, edificios...) no puede hacerse sin tener en cuenta cuestiones como la aerodinámica o la resistencia al viento.

CONTENIDO

El origen último del viento es la diferente cantidad de energía que las distintas regiones de la Tierra reciben del sol. Cuando el suelo se calienta, también lo hace el aire que está sobre él. Como el aire caliente pesa menos que el frío, asciende en la atmósfera (esto es el origen de las diferencias de presión atmosférica), provocando que otra masa de aire ocupe su lugar.

Este movimiento puede observarse en multitud de sucesos, como el humo de las chimeneas, el vapor de agua de una cacerola o la elevación de un globo aerostático. Una experiencia divertida consiste en la creación de burbujas con agua y jabón. El aire que espiramos por la boca está más caliente y pesa menos que el que nos rodea, así que si lo capturamos dentro de una burbuja provoca el ascenso de esta; el viento, por ligero que sea, se encargará de moverla. La creación de burbujas pequeñas es relativamente sencillo (con agua y jabón), pero si quieres experimentar para hacerlas de gran tamaño debes añadir otras sustancias.

EXPERIENCIAS

Para muchas personas el viento solo empuja, como cuando actúa sobre las velas de un barco, pero lo cierto es que también puede provocar el efecto de tirar. Es el efecto que tiene, por ejemplo, un coche al pasar o una puerta que al abrirse parece que los papeles u objetos más ligeros (hojas, polvo...) vuelan tras ellos. Cuanto mayor es la velocidad del viento mayor es esa capacidad de succión. Esta es una causa de que los temporales puedan levantar los tejados de muchas edificaciones. Para observar este efecto se puede hacer un experimento muy sencillo soplando por encima de una tira de papel, siguiendo, por ejemplo, estas instrucciones:

  • https://bit.ly/2RjLSSK