Von der Leyen salva la nueva Comisión con el menor respaldo de la historia

Olatz Hernández / R.P. BRUSELAS / COLPISA, LA VOZ

INTERNACIONAL

Ursula von der Leyen con los nuevos miembros de la Comisión Europea.
Ursula von der Leyen con los nuevos miembros de la Comisión Europea. efe | EFE

Fuga de votos de los populares españoles y los socialistas franceses y alemanes

27 nov 2024 . Actualizado a las 22:37 h.

La Eurocámara dio este miércoles luz verde a la nueva Comisión Europea presidida por Ursula von der Leyen con el menor apoyo de la historia del club comunitario, debido a la fuga de votos de los socialistas franceses, belgas y alemanes y los populares españoles. Compensó las deserciones de aliados tradicionales con el apoyo de los Conservadores y Reformistas (ECR), liderados por el partido de Giorgia Meloni, y una pequeña mayoría de los Verdes.

El nuevo Ejecutivo comunitario, que comenzará a trabajar el 1 de diciembre, recibió 370 votos a favor, 282 en contra y 36 abstenciones. En definitiva, los nuevos comisarios contaron con el respaldo del 51 % de los 719 eurodiputados de un hemiciclo de 720 (tras la decisión de dejar sin escaño a Toni Comín, de Junts), un porcentaje inferior al 62,5 % que Von der Leyen recibió en su primer mandato y a los 401 votos logrados el pasado julio en su reelección como presidenta. 

Durante su discurso previo a la votación, Von der Leyen prometió que peleará por que su nuevo equipo trabaje «desde el centro», supere la «fragmentación» y permanezca unido ante los retos de la nueva legislatura. La realidad es que la presencia de catorce comisarios del Partido Popular Europeo, de los ultraconservadores Raffaelle Fitto (Italia) y Jozef Síkela (Chequia) y del húngaro Olivér Várhelyi convierte a la Comisión Europea en la más escorada a la derecha de la historia, con solo cuatro comisarios socialistas y cinco liberales. 

«Debemos estar unidos y defender nuestros valores», destacó la alemana. En un momento en el que «se explota cada debilidad», Von der Leyen se comprometió a desarrollar una brújula de competitividad, que guiará el trabajo de la próxima Comisión para cerrar la brecha en este sentido con Estados Unidos y China, descarbonizar la industria y aumentar la seguridad evitando las dependencias.

La defensa y el refuerzo de la seguridad europea será otro de los grandes ejes del segundo mandato de la política alemana, que quiere aumentar el gasto militar y trabajar «mano a mano» con la Alianza Atlántica.

En el turno de intervención de los grupos políticos, el líder de los populares, Manfred Weber, pidió el voto a favor de la Comisión y destacó que Orbán, Alternativa para Alemania (AfD) y la francesa Marine Le Pen son «nuestros enemigos políticos». La líder socialista, Iratxe García, también centró su discurso en la extrema derecha, «que quiere desguazar el proyecto europeo». En ese sentido subrayó que el sí de la familia socialdemócrata al próximo Ejecutivo «no es un cheque en blanco». La Izquierda afeó a Von der Leyen que su gabinete «pone fin al cordón sanitario a la ultraderecha». Los Patriotas por Europa, impulsados por el ultraconservador Viktor Orbán y entre los que está Vox, votaron en contra de forma unánime.

El acuerdo alcanzado la semana pasada entre populares, socialdemócratas y liberales sirvió para desbloquear la aprobación de Fitto —candidato propuesto por Giorgia Meloni y que contaba con el rechazo de los socialdemócratas y los liberales— como vicepresidente ejecutivo de Cohesión y Reformas y de , como vicepresidenta ejecutiva de Transición Limpia, Justa y Competitiva, a cuya designación se opuso el Partido Popular Europeo. Finalmente el PP español votó en contra del Ejecutivo por tener en sus filas a Ribera y los socialistas franceses y alemanes también rechazaron a la Comisión por Fitto.

Solo PSOE y PNV votaron a favor del nuevo Ejecutivo comunitario

Los partidos españoles se dividieron en el voto a la nueva Comisión Europea. Solo los eurodiputados del PSOE y la única del PNV, Oihane Agirregoitia, dieron su aprobación. Los 22 eurodiputados del PP votaron en contra, al igual que los seis de Vox, los tres de Se Acabó la Fiesta de Alvise Pérez, los tres de Sumar, Compromís y los Comunes, lo dos de Podemos, los otros dos de Bildu y ERC, y, por último, Ana Miranda del BNG.

El Partido Popular ofreció su lealtad a la Comisión Europea, pero justificó su voto en contra por «no poder apoyar expresamente un Colegio de Comisarios que cuenta con un perfil como el de Teresa Ribera». En el 2014, el PSOE se abstuvo en el voto al Ejecutivo comunitario de Jean-Claude Juncker por la presencia del popular Miguel Arias Cañete.

«Ribera llega a Bruselas con demasiadas cuentas pendientes en España y muy poco crédito en Europa. Así que nos mantenemos firmes: la delegación española dice sí a la Comisión y no a Teresa Ribera», defendió la líder popular en la Eurocámara, Dolors Montserrat.

Teresa Ribera dijo que con su voto en contra el PP «se retrata solo», mientras que la eurodiputada española Iratxe García aseguró que «hoy gana Europa y pierde Aberto Núñez Feijoo», a quien ha acusado de poner sus «intereses partidistas por delante de los intereses europeos».

En su intervención este miércoles en la Eurocámara, Ursula von der Leyen definió a Ribera como una europea «auténtica y devota» con la que espera trabajar «siempre» por el interés de la UE.