200 mujeres encarceladas fueron brutalmente violadas por presos que intentaban fugarse de la mayor prisión del Congo

LA VOZ REDACCIÓN

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Uno de los accesos a la prisión de Makala en el año 2019
Uno de los accesos a la prisión de Makala en el año 2019 GOOGLE MAPS

La cárcel de Makala, ubicada en la capital del país, Kinshasa, se convirtió en una pesadilla para las presas. Las reclusas fueron violadas por otros prisioneros que pretendían huir de unas instalaciones pensadas para 1.500 personas y en las que hay 15.000

14 sep 2024 . Actualizado a las 10:51 h.

La madrugada del pasado lunes 2 de septiembre la prisión de Makala era la ratonera habitual. Ubicada en la capital de la República Democrática del Congo, Kinshasa, y pensada para 1.500 presos y presas, actualmente se encuentra superpoblada, multiplicando ese número por 10. Esa jornada además se gesta un intento de huida que acabaría de la peor forma posible. Según han denunciado varias ONG's que operan en el país africano 129 personas murieron y 59 resultaron heridas en el enfrentamiento entre los fugitivos y las autoridades que trataban de impedir la fuga. Además, la investigación abierta por estos hechos ha revelado también otro hecho bestial y aterrador. Alrededor de 200 mujeres fueron violadas por internos que habrían aprovechando el tumulto para forzar la entrada del pabellón nueve, que acoge a 320 reclusas. Una vez dentro, y según el relato de las víctimas en el juicio que está teniendo lugar estos días, algunos de ellos las agredieron sexualmente de forma violenta. «Me violaron 10 hombres, me sujetaron en el suelo y perdí el conocimiento», es uno de los testimonios de las prisioneras que han podido escucharse en audiencia pública. Las mujeres aseguran además que los presos entraron gritando y rompiendo todo a su paso y que también les robaron el poco dinero que tenían, sus teléfonos móviles e incluso los colchones, por lo que ahora duermen en el suelo. Las víctimas quedaron después sin atención durante varios días, tardando organizaciones como Médicos Sin Fronteras casi una semana en acceder al penal y repartir kits de violencia sexual que deben ser administrados como muy tarde 72 horas después de consumarse las agresiones.

64 personas están siendo juzgadas por un tribunal congoleño por su participación en estas violaciones, según el portal de noticias del país Actualité. El tribunal militar encargado del caso ha reclamado expertos médicos tanto militares como de Naciones Unidas para que se hagan cargo de las decenas de víctimas de estas brutales agresiones. Un total de cuatro menores de edad víctimas de violación han comparecido recientemente para relatar los incidentes. Una de ellas ha detallado que fueron sorprendidas «mientras dormían». «Escuchamos el crepitar de las balas y notamos que forzaban la puerta», ha denunciado.

«Los hombres lograron acceder. Estaba escondida en la ducha, pero uno de ellos me vio, me sacó de la ducha, me mostró un cuchillo y me amenazó con matarme si seguía gritando», ha señalado. «Me cortó la ropa interior, llegaron otras tres personas y me violaron por turnos», ha manifestado, relato similar al expresado por otras víctimas.

El ministro del Interior del Congo, Jacquemain Shabani, quien es además viceprimer ministro, afirmó tras el intento de fuga que 24 personas habían muerto tras ser tiroteadas, mientras que «el resto de víctimas murieron por aplastamiento o asfixia». Además, confirmó casos de violación durante los incidentes y prometió que las autoridades llevarían a cabo una investigación.