Macron deja caer al Gobierno con el objetivo de revitalizar su mandato

Beatriz Juez PARÍS / COLPISA

INTERNACIONAL

Borne y Macron, en un acto el 14 de julio del 2023 en el Louvre.
Borne y Macron, en un acto el 14 de julio del 2023 en el Louvre. PASCAL ROSSIGNOL | REUTERS

Élisabeth Borne presenta la dimisión para permitir la remodelación del Gabinete

09 ene 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Año nuevo, Gobierno nuevo. La primera ministra francesa, Élisabeth Borne, presentó este lunes la dimisión de su Gabinete al presidente Emmanuel Macron. Su renuncia estaba cantada desde hace tiempo debido a las tensiones provocadas por la reforma de las pensiones y el plan migratorio. Pero sobre todo por la necesidad de Macron, muy impopular en los sondeos, de revitalizar su mandato y dar un nuevo aliento a su política año y medio después de su reelección.

Borne y el resto de miembros de su equipo «garantizarán el tratamiento de los asuntos corrientes hasta el nombramiento de un nuevo Gobierno», anunció un breve comunicado de prensa del Elíseo, tras la mera formalidad de la aceptación por Macron de la dimisión. «Señora primera ministra, querida Élisabeth Borne, vuestro trabajo al servicio de nuestra nación ha sido a diario ejemplar. Usted ha llevado a cabo nuestro proyecto con la valentía, el compromiso y la determinación de las mujeres de Estado. De todo corazón, gracias», escribió Macron en la red social X (antiguo Twitter).

En la V República, Francia solo ha tenido dos primeras ministras. Edith Cresson hizo historia en 1991 al ser nombrada por el presidente socialista François Mitterrand. Cresson solo duró once meses en el puesto. Borne ha superado la marca de su antecesora, al ser la inquilina del palacio de Matignon durante un año y siete meses. El anuncio de la dimisión de Borne y su Gobierno no ha sido una sorpresa. La prensa gala llevaba meses especulando sobre ello. Dos de cada tres franceses (66 %) deseaban la marcha de la primera ministra, según un sondeo reciente de Odoxa-Backbone Consulting para Le Figaro.

Según prevé el artículo 8 de la Constitución francesa, el presidente de la República nombra al nuevo primer ministro. Y, a propuesta de este, designará a los demás miembros del Gobierno en las próximas horas o en los próximos días.

Dos posibles sucesores

Dos ministros se encuentran entre los favoritos para suceder a Borne, según las quinielas de la prensa: Gabriel Attal, el joven titular de Educación, y Sébastien Lecornu, que lleva la cartera de Defensa. También se especula con la posibilidad de que Macron nombre a Julien Denormandie, exresponsable de Agricultura.

La oposición no cree que el cambio del Ejecutivo cambie nada. «El primer ministro será Macron», bromeó antes del anuncio de la dimisión de Borne el eurodiputado socialista Raphaël Glucksmann, haciendo alusión al poco poder que tienen los jefes de Gobierno en Francia. «Puedes cambiar el equipo», pero «la política no va a cambiar», opinó Mathilde Panot, jefa de filas de los diputados de La Francia Insumisa (extrema izquierda) en la Asamblea Nacional.

Veinte meses agitados

Borne, ingeniera de formación y alta funcionaria, fue tres veces ministra de Macron: como titular de Transportes, de Transición Ecológica y de Trabajo. El jefe del Elíseo la nombró primera ministra en mayo del 2022 para suceder a Jean Castex, tras ser reelegido presidente por un segundo mandato.

Sus veinte meses en Matignon han sido bastante agitados. Han estado marcados por las protestas de los franceses en la calle contra la polémica reforma de las pensiones y por el agitado debate sobre la reforma migratoria. Durante este período, Borne ha sufrido 28 mociones de censura, todo un récord en la V República.