Los sindicatos franceses sostienen el pulso a Macron con otra masiva protesta

asunción serena PARÍS / E. LA VOZ

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Una mujer sostiene una pancarta durante la protesta en París contra la reforma de las pensiones de Macron
Una mujer sostiene una pancarta durante la protesta en París contra la reforma de las pensiones de Macron SARAH MEYSSONNIER | REUTERS

La oposición a la reforma de las pensiones no decae en el sexto día de movilizaciones

07 mar 2023 . Actualizado a las 21:58 h.

Los sindicatos franceses mostraron este martes que la movilización contra la reforma de las pensiones de Emmanuel Macron no decae en su sexto día de huelgas y manifestaciones. En París se manifestaron 700.000 personas, según la CGT. Aunque sus cifras suelen ser cinco veces superiores a las que registra la Prefectura de policía, en cualquier caso, había más gente que en las anteriores convocatorias, que ya fueron consideradas un éxito.

La única sombra fue la mayor presencia de grupos radicales de izquierdas y anarquistas, que restaron protagonismo a las decenas de miles de personas que se manifestaron pacíficamente. Desde la primera hora de la marcha, los denominados black-blocs se enfrentaron a las fuerzas del orden arrojándoles una lluvia de adoquines y algunos cócteles molotov, destrozaron mobiliario urbano, bancos y agencias y prendieron fuegos en la calzada para impedir que la manifestación avanzara.

El 64 % de los trabajadores de TotalEnergies lograron paralizar las expediciones de las siete refinerías de la petrolera francesa, y en algunos lugares la huelga va a prolongarse: al menos hasta el jueves en Gonfreville (Seine-Maritime) y hasta el viernes en Donges (Loira-Atlántico). Aunque no sale el carburante de las refinerías, los depósitos que suministran las 11.000 gasolineras tienen llenas sus reservas, y de momento se excluye una eventual escasez de combustible.

El tráfico ferroviario estuvo muy afectado por el paro, con un 39 % de huelguistas y la supresión de 4 de cada 5 trenes tanto de alta velocidad como interregionales. Los sindicatos de las dos empresas esperaban movilizar otro tanto de huelguistas también este miércoles, aunque la frecuencia de trenes será superior —se suprimirá uno de cada 3—.

La RATP, empresa de transporte público parisino, anunció este martes que las perturbaciones seguirán este miércoles, aunque con una mejora sensible en el tráfico de trenes de cercanías y autobuses, pero con un servicio muy afectado en el metro.

Respecto al tráfico aéreo, la Dirección de Aviación Civil había pedido previamente a las compañías que anularan el 20 % de los vuelos del aeropuerto Charles de Gaulle, mientras que en Orly y el resto de aeropuertos de provincias se cancelaron el 30 % de enlaces.

Las cifras comunicadas por el Ministerio de Educación, 32,71 % de huelguistas, fueron algo superiores a las de las jornadas previas de movilización.

Al mismo tiempo, en el Palacio de Luxemburgo, los senadores seguían las discusiones sobre la reforma de las pensiones y estudiaban precisamente el denostado artículo 7 que recoge la ampliación de la edad de jubilación de 62 a 64 años. La mayoría senatorial está en manos de la derecha y el centro, que son favorables a la reforma.

Los sindicatos, que juegan su credibilidad con esta movilización, se felicitaron de la «movilización histórica» y pidieron al Gobierno que «no haga oídos sordos», aunque hasta ahora, se ha negado a negociar con la intersindical.