Asegura que enviará «decenas de miles» gracias a su capacidad de transporte aéreo
16 feb 2023 . Actualizado a las 21:53 h.Hace ya semana y media que tembló la tierra en Turquía y Siria y, tras concentrar los esfuerzos en la búsqueda y rescate de personas con vida bajo los escombros, ahora toca ayudar a quienes intentan salir adelante sobre esas ruinas. Con esa intención, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, anunció este jueves que el organismo está utilizando toda su capacidad de transporte aéreo para el envío de «decenas de miles» de tiendas de campaña con el objetivo de dar cobijo a quienes lo han perdido todo.
«Estamos ante el desastre natural más grave que ha sufrido un país de la Alianza desde su fundación en 1949», reconoció el líder de la organización tras entrevistarse con el ministro turco de Exteriores, Mevlut Cavusoglu, en Ankara. También se reunió con el presidente, Recep Tayyip Erdogan. La cifra de fallecidos sigue en ascenso —casi 40.000 entre los dos países— aunque todavía se producen milagros.
Mientras tanto, la ayuda a la vecina Siria se ha acelerado en las últimas jornadas y la ONU anunció asimismo el envío de más de un centenar de camiones con tiendas, calefactores y kits para hacer el test del cólera. El organismo internacional asumió que «el número de muertos seguirá creciendo conforme avance el desescombro».
En este país preocupa el estado sanitario de provincias como Idlib, la más afectada, y desde el Comité Internacional de Cruz Roja (CICR) alertaron de «graves brotes de epidemias». Este organismo ha logrado recaudar siete millones de euros en la primera fase de respuesta para afrontar los efectos de los seísmos, tras el llamamiento realizado por la Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja para la atención inmediata y recuperación de las zonas afectadas de los próximos diez meses, según informa Europa Press.
Rechazo a los refugiados sirios
Los sectores ultranacionalistas otomanos, por su parte, han lanzado una fuerte campaña contra los refugiados sirios, a quienes acusan de saquear casas y tiendas en las ciudades afectadas. Organizaciones de derechos humanos como Tihek avisaron del riesgo de enfrentamientos y pidieron «evitar expresiones y publicaciones que contengan discriminación y discurso de odio». En las diez provincias afectadas en el lado turco de la frontera viven la mitad de los casi cuatro millones de refugiados de Siria que acoge el país.