EE.UU. derriba el globo espía chino nada más llegar a aguas del Atlántico

Miguel Palacio NUEVA YORK / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Un caza disparó un misil contra el dirigible tras sobrepasar las costas de Carolina del Sur

05 feb 2023 . Actualizado a las 20:56 h.

El globo espía descubierto el miércoles sobre el espacio aéreo de Montana prosiguió este sábado su trayectoria por el este de Estados Unidos en dirección al océano Atlántico. El artefacto sobrevoló del viernes al sábado los estados de Misuri, Kentucky, Tennessee, Carolina del Norte y Carolina del Sur antes de dirigirse a la costa.

La Casa Blanca había descartado derribar el dirigible mientras sobrevolara territorio estadounidense por seguridad y esperó para ello a su salida al mar. «Nos encargaremos de eso», dijo el presidente Joe Biden., que ya el miércoles había dado la orden de poner fin al vuelo del globo. Un caza estadounidense lo derribó con un misil nada más sobrepasar la costa  y los restos se hundieron en el Atlántico sin causar daños. Acto seguido comenzaba la operación para recuperar  lo que quedaba del artefacto y conocer así detalles de una misión con la que Pekín buscaba «vigilar sitios estratégicos».

La decisión de la Administración Federal de Aviación de restringir la actividad en tres aeropuertos de las dos Carolinas por «iniciativas de seguridad nacional» hacía presagiar que la acción contra el aparato era inminente, mientras los sitios web de seguimiento de vuelos mostraba a varios aviones militares en la trayectoria del vuelo del dirigible.

Cautela con China

La Casa Blanca sigue optando por la cautela ante un incidente que podría dificultar una de sus prioridades políticas: buscar el desbloqueo de las relaciones con el gigante asiático. De acuerdo con el diplomático estadounidense Daniel Russel, la visión del presidente está marcada por una cautela extrema frente a este tipo de situaciones. «En la mente de Biden [...] está el riesgo real de un incidente o accidente que tenga lugar a causa de que China malinterprete alguna situación», manifestaba Russel a The Washington Post. 

En un acto del Partido Demócrata el viernes, Biden mencionó que sus contactos con el presidente Xi Jinping se remontan a su etapa de vicepresidente de Barack Obama. Entonces, ya fue el encargado de acercarse a Xi, porque ya sabían «que sería presidente».

El incidente del globo espía daña los intentos de ambos países de recuperar unos contactos diplomáticos que pretendían avanzar durante la visita del secretario de Estado, Antony Blinken, a China, gestada en el encuentro entre Biden y Xi en la cumbre del G20 en Bali. «Creo firmemente que no hay necesidad de una nueva guerra fría» dijo Biden entonces.

Fuentes gubernamentales aseguran que Blinken ya ha manifestado a China que su intención es la de viajar en cuanto haya «la primera oportunidad y las condiciones lo permitan».

Además de provocar la suspensión del viaje del secretario de Estado al país asiático también ha servido al Partido Republicano para retratar a Biden como un líder blando con China.

Donald Trump, a través de su perfil en Truth Social, instó al Gobierno a derribar el artefacto. Al expresidente se unía la que será su rival en las primarias republicanas, la exgobernadora de Carolina del Sur Nikki Haley, que acusó a Biden de estar «dejando que China nos pase por encima». Por su parte, el portavoz de los republicanos en la Cámara Baja, Kevin McCarthy, resaltaba que el incidente era una «flagrante falta [de China] contra la soberanía norteamericana».