Polémica en Portugal por el coste de la visita del papa a las Jornadas Mundiales de la Juventud

Brais Suárez
brais suárez OPORTO / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

El papa Francisco, durante una audiencia en el Vaticano el pasado mes de diciembre
El papa Francisco, durante una audiencia en el Vaticano el pasado mes de diciembre RICCARDO ANTIMIANI | EFE

De los 81 millones previstos, 4,2 se han destinado a un palco con capacidad para 2.000 personas

28 ene 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque es difícil discutir la influencia de la Iglesia en Portugal, lo difícil era ponerle precio. Para las distintas instituciones lusas encargadas de organizar la visita del papa este verano por las Jornadas Mundiales de la Juventud, del 1 al 6 de agosto, no parece haber límite. En concreto, destinarán al evento más de 81 millones de euros de fondos públicos, una cantidad que escama a unos ciudadanos preocupados por la inflación, que resulta difícil justificar a los responsables y que incomoda hasta a la propia Iglesia.

«[Una cifra] que nos apenó a todos», dijo el obispo auxiliar de Lisboa, Américo Aguiar, quien cree que el proyecto debe ser reevaluado. Se refiere, sobre todo, a la parte más llamativa del presupuesto, un palco de 4,2 millones y capacidad para unas 2.000 personas, entre obispos, coro, orquesta, traductores... Generó polémica desde que se conocieron los detalles y esta no hizo más que crecer cuando el Patriarcado desmintió al presidente, Marcelo Rebelo de Sousa, que había dicho desconocer el gasto.

Tras una reunión entre los organizadores, los representantes de la Iglesia expresaron que «se acordó ver dónde se puede discutir y cortar algunos gastos», decía Aguiar, que también preside la Fundação JMJ. En esa línea, Rebelo de Sousa exigió que se respete «la visión simple, pobre y no triunfalista» del papa Francisco. Se desconoce cuánto aportará la Iglesia.

El Ayuntamiento de Lisboa destinará tanto como el Gobierno central: 35 millones, que su alcalde, el conservador Carlos Moedas, sigue reivindicando: «La cuestión es si queremos ser o no, durante esos días, el centro del mundo, como vamos a ser (…). Todo lo que invertiremos tendrá un retorno de 10 o 20 veces más». Explicó que se rehabilitarán amplias zonas de la ciudad y justificó otro de los aspectos más espinosos de la organización, que es no haber sometido las obras a concurso público: «La única manera de tener todo listo es la concesión directa». Son muy contados los casos en que la ley portuguesa permite este tipo de concesiones si la cifra supera los 50.000 euros.

Moedas también aseguró que no se excederá el presupuesto, pero esto ya ha ocurrido, pues la solución prevista ascendía en un principio a dos millones de euros para el palco. En el 2011, Madrid gastó 50 millones de euros en las JMJ. En la última celebración, en el 2019, Panamá se limitó a acondicionar el lugar de los actos.