Miles de manifestantes llegan a Lima para participar en la «toma» de la capital peruana
INTERNACIONAL
La capital refuerza la seguridad con unos 9.600 agentes de policía, mientras la presidenta pide una manifestación «en paz y en calma»
18 ene 2023 . Actualizado a las 21:21 h.Prueba de fuego para la presidenta Dina Boluarte. Miles de manifestantes llegaban este miércoles a Lima, provenientes de todo Perú, para participar este jueves en una protesta masiva, enmarcada en una jornada de huelga general, en demanda de la renuncia de la mandataria del país andino, cinco semanas después de su llegada al poder.
«Sabemos que quieren tomar Lima por todo lo que está saliendo en las redes. Y los llamo a tomar Lima, sí, pero en paz y en calma. Los espero en la casa de Gobierno para dialogar sobre las agendas sociales que tienen», expresó Boluarte, que asumió su cargo el pasado 7 de diciembre, tras la detención del expresidente Pedro Castillo, que se encuentra en prisión provisional, acusado de rebelión y conspiración al tratar de cerrar inconstitucionalmente el Congreso. La jefe de Estado, en cambio, rechaza hablar sobre la agenda política planteada por los manifestantes, que considera «inviable».
Quienes protestan en las calles reclaman, además de su salida del poder, el cierre del impopular Congreso —rechazado por más del 90 % de la población— la celebración de elecciones generales anticipadas en el 2023 —el Legislativo aprobó en diciembre adelantarlas al 2024— la conformación de una asamblea constituyente y, una parte de los manifestantes, piden también la libertad de Pedro Castillo.
En las redes sociales circulan imágenes de grandes caravanas de manifestantes movilizándose en autobuses, camiones o camionetas, especialmente desde las regiones del sur de Perú. Los bloqueos y los paros de carreteras continúan en 94 puntos del país, afectando a 16 carreteras nacionales. Las protestas, que duran ya un mes, dejan, al menos, 50 muertos (41 manifestantes, un policía y ocho fallecidos en los bloqueos de carreteras).
Las autoridades anunciaron que se han destinado 9.600 agentes de policía para mantener el orden público en la capital.
En la víspera de la manifestación, el Gobierno ha vuelto a rechazar el regreso al país del expresidente boliviano Evo Morales, acusado por la Fiscalía de la región de Puno de delitos contra la seguridad nacional de Perú.
«El señor Evo Morales ha hablado de una insurrección en el país, pero ya no podrá entrar a Perú hasta que la situación cambie», señaló al respecto el primer ministro, Alberto Otárola.