Arranca el juicio contra la empresa familiar de Trump por fraude fiscal

Mercedes Gallego NUEVA YORK / COLPISA

INTERNACIONAL

El sede de la empresa familiar de Trump, en el número 40 de Wall Street
El sede de la empresa familiar de Trump, en el número 40 de Wall Street SHANNON STAPLETON | REUTERS

Al expresidente se le acumulan los frentes judiciales, que «probablemente» le impedirán presentarse a la reelección, según señaló él mismo. Por este caso se enfrenta a una multa de casi dos millones de euros

25 oct 2022 . Actualizado a las 10:59 h.

A pesar de todos sus crímenes, Al Capone fue a la cárcel por evasión de impuestos. Ese no será el caso de Donald Trump, porque el juicio que comenzó la tarde del lunes en Manhattan no es contra él, sino contra la empresa que heredó de su padre, Trump Organization. Como las sociedades no pueden ir a la cárcel, si se la encuentra culpable de una docena de cargos solo enfrentará una multa máxima de 1,7 millones de dólares. Pero eso no le ahorrará la humillación de un juicio muy público que puede durar un mes.

Para empezar sus abogados y la Fiscalía tienen por delante una difícil tarea: encontrar doce hombres justos en Nueva York que no tengan una opinión preconcebida. «Yo no hubiera sido objetiva», contó el lunes al salir de los juzgados una mujer que fue excusada por motivos de trabajo. «En mi cabeza es culpable». Se refería al expresidente, cuando lo que se juzga es su empresa.

Testimonio clave

La Fiscalía ya ha probado que se han cometido delitos de fraude, falsificación de documentos y evasión de impuestos, entre otros. Eso quedó claro a final de agosto, cuando el jefe financiero, Alan Weisselberg, firmó su confesión y aceptó declarar en el juicio contra la empresa, a cambio de una sentencia reducida. Weisselberg lleva casi medio siglo trabajando para la familia Trump y es un leal donde los haya. De hecho, se ha negado a testificar directamente contra su antiguo jefe, al que sirvió durante 15 años. Sin embargo, ya tiene 75 años y la perspectiva de pasar sus últimos en la cárcel era difícil de aceptar.

Gracias a su testimonio, que está consensuando con las dos partes, se espera que reciba una sentencia de cinco meses, que puede ser reducida a tres por buena conducta, además de pagar una multa de casi dos millones de dólares.

La defensa alegará que mintió

Paradójicamente la defensa de Trump Organization dirá que mintió al declararse culpable y decir que sabía que estaba haciendo algo mal al aceptar que se convalidara parte de su sueldo en pisos, coches y hasta la universidad de sus hijos. Los abogados de Trump prometen demostrar que creía hacer lo correcto al confiar en los contables externos de la empresa. Incluso si no lo logran, Trump Organization solo tendrá que pagar 1,7 millones de dólares, calderilla para el exmandatario que, sin embargo, enfrenta otro caso civil en Nueva York y otro penal en Georgia.

Sus problemas judiciales no han hecho más que empezar, lo que no impedirá que «probablemente tenga que presentarse de nuevo a las elecciones», según dijo el viernes en Texas, «para lograr que el país vuelva a ser exitoso seguro y glorioso». 

Trump con el senado Lindsey Graham, en noviembre del 2019.
Trump con el senado Lindsey Graham, en noviembre del 2019. JONATHAN ERNST | REUTERS

El Supremo bloquea la citación judicial a un senador aliado de Trump

El juez ultraconservador del Tribunal Supremo de EE.UU. Clarence Thomas bloqueó  temporalmente este lunes una orden para que el senador republicano Lindsey Graham, uno de los aliados más próximos a Donald Trump, declarase en la investigación sobre los intentos del exinquilino de la Casa Blanca de invalidar las elecciones presidenciales del 2021 en un tribunal de Georgia.

La suspensión de la citación se ha producido tres días después de que los abogados de Graham pidieran a Thomas que retrasara la comparecencia del senador. Esta medida dará más tiempo a los abogados del acusado para presentar escritos argumentando si se debe permitir que la citación se mantenga o no, recoge el canal CNBC. 

Desde mayo, un gran jurado especial en Georgia investiga si Trump y otras personas, incluido Graham, presionaron a los representantes políticos de ese estado en relación con los resultados de las elecciones de 2020, que el entonces mandatario perdió.

En Georgia y otros estados de EE.UU., los grandes jurados especiales no pueden emitir acusaciones criminales, pero sí tienen poder para exigir la comparecencia de testigos bajo citación judicial y la transferencia de documentos, dentro de un proceso que transcurre en secreto.

Al terminar su cometido, ese tipo de jurados, compuestos por entre 16 y 23 personas, emiten un informe con sus conclusiones y a veces recomiendan algunas medidas, pero corresponde a los fiscales decidir si acusan o no, algo para lo que necesitarían presentar pruebas a otro gran jurado.