Las aspiraciones de Johnson al liderazgo ahondan la división entre los «tories»

juan francisco alonso LONDRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

El ex primer ministro Boris Johnson saluda a su llegada al aeropuerto de Gatwick
El ex primer ministro Boris Johnson saluda a su llegada al aeropuerto de Gatwick HENRY NICHOLLS | REUTERS

Sunak consigue los apoyos para postularse, aunque no desvela si lo hará

23 oct 2022 . Actualizado a las 09:13 h.

Boris Johnson fracasó en su intento por superar a Margaret Thatcher como el primer ministro británico que más tiempo ha estado en Downing Street. Sin embargo, ahora quiere equipararse con otro gran referente del Partido Conservador y de él en lo personal: Winston Churchill. El exmandatario ha vuelto a toda prisa desde el Caribe, donde estaba de vacaciones para reunir fuerzas suficientes que le permitan competir por el liderato tory y así recuperar el puesto que, según él, se vio «forzado» a dejar hace unas seis semanas, una posibilidad que aterra a algunos sectores de la formación.

Nada más tocar tierra, cerca del mediodía del sábado, Johnson se puso en contacto con diputados y parte de lo que fue su equipo de Gobierno. Así consiguió que la polémica exministra del Interior Priti Patel apoyara sus intenciones de volver a la primera línea de la política, diciendo que Johnson «tiene una trayectoria de tomar las decisiones correctas en grandes momentos». Obviamente la exfuncionaria no se refería al Partygate, sino al poner en marcha el plan de vacunación contra el covid-19 y apoyar desde un primer momento a Ucrania ante la invasión rusa.

Sin embargo, ni las palabras de Patel ni los apoyos de miembros del actual Ejecutivo de la dimisionaria Liz Truss, ni siquiera las propias llamadas telefónicas que el ex primer ministro hizo a lo largo del día han dado los resultados esperados, hasta ahora, pues Johnson apenas tenía hasta la tarde el voto de 53 de los 357 diputados conservadores, es decir, todavía necesitaba 47 más para poder ser considerado un candidato oficialmente.

No obstante, fuentes cercanas al comando de campaña que ha armado el exmandatario aseguran que él alcanzará los apoyos necesarios. Hasta ahora solo el exministro de Economía Rishi Sunak ha conseguido superar el primer requisito fijado por el Comité 1922 del partido para participar en estas primarias, el cual le asegura la posibilidad de poder competir, por segunda vez en menos de dos meses por Downing Street. Sin embargo, el exfuncionario siguió este sábado sin revelar si se postulará o no para el cargo. Esto, pese a que para el final del día había reunido el respaldo público de 122 legisladores conservadores.

La lentitud con la que crece la campaña de Boris Johnson se puede atribuir a las maniobras de quienes se oponen a su regreso, entre los cuales figuran algunos de sus cercanos colaboradores.

Dudas sobre su situación

«El país necesita un primer ministro que se enfoque 100 % en los problemas del país (…) pero los hechos son que él va a tener que enfrentar la siguiente fase de la investigación de Comité de estándares [sobre el Partygate] y no veo que sea práctico elegir a alguien que tendrá que lidiar con esto», afirmó a la BBC Dominic Raab, quien fue el segundo de a bordo de Johnson y que ahora apoya a Sunak.

En similares términos se pronunció el exministro del Brexit David Frost, quien pese a calificar a Johnson como «el héroe» que ejecutó el divorcio de la Unión Europea aseguró que viene herido por el escándalo de las fiestas ilegales, el cual podría incluso costarle el puesto. «Tenemos que avanzar, no podemos arriesgarnos a vivir otro año de caos y confusión», escribió en Twitter, tras respaldar a Sunak.

Amenaza de renuncia

Más contundente fue el veterano diputado Roger Gale, quien llegó a amenazar con renunciar al partido si sus colegas elegían al exmandatario nuevamente.

La BBC anunciaba que Johnson y Sunak tenían previsto reunirse el sábado, posiblemente para intentar pactar una candidatura de consenso que haga innecesarias otras primarias que ahonden las divisiones en la formación. Sin embargo, pocos creen posibles que puedan reconciliarse.

La renuncia de Sunak el verano pasado precipitó la crisis que provocó la caída de Johnson y durante las pasadas primarias muchos de los fieles al exmandatario lo tacharon de «traidor».

Por su parte, la actual portavoz conservadora en la Cámara de los Comunes, Penny Mordaunt, la única que hasta ahora ha oficializado sus intenciones de reemplazar a la dimisionaria Truss, apenas ha visto crecer sus apoyos, de 20 a 23. No obstante, su campaña, sobre todo en las redes sociales, es la más activa.

Todavía restan más de 24 horas para que los restantes 159 legisladores conservadores se decanten por u otra opción.

Miles de militantes podrían quedarse sin poder votar

Un correo electrónico, un voto. Miles de militantes conservadores están en riesgo de verse impedidos de participar en las primarias que el partido celebrará la próxima semana para elegir al reemplazo de la dimisionaria Liz Truss por no tener correo electrónico o no figurar este en los registros de la formación.

El diario The Telegraph aseguró que la formación va a contactar con unos 22.000 afiliados en los próximos días para intentar que actualicen sus datos.

Pero como si esto no fuera suficiente también han surgido dudas sobre la seguridad del sistema para votar electrónicamente. ¿La razón? En el pasado proceso celebrado en el verano el Centro Nacional de Seguridad Cibernética (NCSC, por sus siglas en inglés) detectó vulnerabilidades.

Por su parte, una publicación digital quiso indagar en esas vulnerabilidades y consiguió registrar a una tortuga e incluso a la ex primera ministra Margaret Thatcher, fallecida en el año 2013, aunque utilizando su apellido de soltera: Roberts.

Pese a esto el presidente de la formación, Jake Berry, aseguró a la BBC que el proceso será limpio. «Sin entrar en las medidas de seguridad que tomaremos, por razones que estoy seguro comprenderán, estamos satisfechos de que el sistema de votación en línea sea seguro», dijo.

No obstante, expertos en ciberseguridad como Emily Taylor, directora de la empresa Oxford Information Labs, dudan que el proceso esté blindado. «No es una campaña electoral nacional, por lo que no tienen todos los recursos del Estado. Eso significa que es muy poco probable que tengan los recursos necesarios para manejar la seguridad cibernética de manera satisfactoria», dijo.

El proceso de votación electrónica se abrirá una vez aclarado si hay más de un candidato al cargo, pues si hubiera uno solo, no habría votación. De haber tres aspirantes a suceder a Truss, entonces los diputados celebrarán una ronda de votaciones este lunes para reducir este número a dos y a partir de allí se permitirá a los militantes votar.