Hungría perderá 7.500 millones de la UE si no respeta las exigencias de Bruselas

Olatz Hernández BRUSELAS / COLPISA

INTERNACIONAL

El ministro húngaro de Desarrollo Regional y Utilización de Fondos de la UE, Tibor Navracsics, en una conferencia de prensa sobre la propuesta de la Comisión Europea de retener los fondos de Hungría.
El ministro húngaro de Desarrollo Regional y Utilización de Fondos de la UE, Tibor Navracsics, en una conferencia de prensa sobre la propuesta de la Comisión Europea de retener los fondos de Hungría. PETER LAKATOS | EFE

Es la primera vez que Bruselas toma esta decisión respecto a un Estado miembro

19 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Las amenazas siguen marcando la relación entre Hungría y la Unión Europea (UE). Bruselas aumentó el sábado la presión sobre el país para que solucione sus incumplimientos en materia de Estado de Derecho, con la activación del mecanismo de condicionalidad de los fondos europeos. De esta forma, el Ejecutivo comunitario propone congelar 7.500 millones de euros que Hungría debe recibir de la UE.

Es la primera vez que Bruselas aplica este mecanismo a un Estado miembro, una decisión adoptada por unanimidad. «Este paso demuestra que la Comisión está decidida a proteger el presupuesto de la UE y a usar todas las herramientas en nuestras manos para hacerlo», apuntó el comisario a cargo del Presupuesto y la Administración europea, Johannes Hahn.

En concreto, la Comisión pide a Hungría que resuelva las «irregularidades sistemáticas» que afectan a la contratación pública y a la falta de investigaciones y enjuiciamientos por casos de corrupción. Las autoridades húngaras ya recibieron un aviso en julio, que les advertía de la posibilidad de congelar fondos, a no ser que el país desarrollase medidas correctoras para solucionar los problemas detectados.

«Pasos en la buena dirección»

Con todo, el Ejecutivo comunitario destacó ayer que Hungría «está dando pasos en la buena dirección». El país ha propuesto 17 medidas para solventar los problemas detectados por la UE, con la modificación del código penal húngaro, la creación de una autoridad independiente judicial o un organismo para combatir la corrupción. «Son medidas adecuadas, y somos positivos», reconoció el comisario Hahn.

Ahora, el Gobierno de Orbán deberá llevar a cabo cambios legislativos para implementar las medidas. Mientras tanto, la UE continuará el proceso para suspender el 65 % del presupuesto europeo de tres programas de fondos de cohesión destinados a este país. Tras hacerse pública la iniciativa de la Comisión, los Estados miembros tienen un mes —que se podrá alargar a dos— para decidir. Bruselas seguirá monitorizando la situación y el 19 de noviembre analizará el estado de las reformas.

Las dudas sobre el estado de derecho en el país mantienen paralizado el plan de recuperación húngaro, de 5.900 millones de euros. Preocupa, además, el comportamiento de Orbán ante la guerra en Ucrania, con posturas que parecen más cercanas a Moscú que a Kiev.