Trump tachó de cobarde a Pence por negarse anular las elecciones

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

 Liz Cheney, vicepresidenta de la comisión que investiga el asalto al Capitolio.
Liz Cheney, vicepresidenta de la comisión que investiga el asalto al Capitolio. SARAH SILBIGER | Reuters

17 jun 2022 . Actualizado a las 09:14 h.

Las presiones que ejerció Donald Trump sobre su entonces vicepresidente Mike Pence para que anulara la victoria de Joe Biden en la sesión del Congreso de EE.UU. del 6 de enero de 2021 centró la tercera audiencia del comité que investiga el asalto al Capitolio. La sesión se abrió con los elogios del demócrata Bennie G. Thompson, presidente del comité, a Pence por su «coraje», y con la republicana Liz Cheney acusando a Trump de querer subvertir la Constitución.

Las presiones contra Pence comenzaron dos días antes del asalto, según testificó Greg Jacob, abogado entonces del vicepresidente. Tanto él como J. Michael Luttig, un ex juez federal conservador, cuestionaron que Pence tuviera el poder de anular las presidenciales como aseguraba John Eastman, el arquitecto de la teoría de Trump. «Ningún vicepresidente en los 230 años de historia había afirmado tener ese tipo de autoridad», dijo Jacob. Para Luttig, si Pence hubiera cedido EE.UU. se «habría «hundido en una revolución», según informa The Washington Post.

El 6 de enero, en una acalorada conversación telefónica, Trump tachó de «cobarde» a Pence al no ceder a sus demandas. Los congresistas también trataron los riesgos que vivió Pence aquel día con Trump aplaudiendo los cánticos de la turba de «cuelguen a Mike Pence». «La vida del vicepresidente estuvo en peligro», según la declaración al FBI de un informante del grupo ultraderechista Proud Boys.