Las municipales en Italia se saldan con una doble derrota para Salvini

Valentina Saini VENECIA / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

 Los partidos de Matteo Salvini, Giorgia Meloni y Silvio Berlusconi se presentaron en coalición a las elecciones municipales italianas.
Los partidos de Matteo Salvini, Giorgia Meloni y Silvio Berlusconi se presentaron en coalición a las elecciones municipales italianas. Guglielmo Mangiapane | Reuters

La coalición de derechas se hace con las alcaldías de Palermo y Génova, pero pierde Verona en favor del exfutbolista Damiano Tommasi

13 jun 2022 . Actualizado a las 20:51 h.

A la espera de los resultados oficiales de las elecciones municipales de Italia del domingo, los sondeos a pie de urna anuncian una victoria de la derecha y, al mismo tiempo, una derrota para sus líderes más destacados.

Por un lado, la coalición derechista (Forza Italia de Silvio Berlusconi, la Liga de Matteo Salvini y Hermanos de Italia de Giorgia Meloni) ganó en muchas de las ciudades en las que se presentó unida: como Génova, donde el alcalde conservador Marco Bucci habría ganado en la primera vuelta, y en Palermo, la capital de Sicilia, donde la izquierda llevaba más de diez años gobernando.

Pero en Verona, una ciudad tradicionalmente de derechas, donde la coalición se había dividido, el actual alcalde del partido ultranacionalista Hermanos de Italia, Federico Sboarina, fue derrotado por el candidato de la izquierda, el exfutbolista de la Roma Damiano Tommasi. Sboarina contaba con el apoyo de Meloni y Salvini, pero Forza Italia prefirió apoyar al moderado Flavio Tosi.

Para Salvini, la jornada electoral fue una doble derrota: el domingo también se celebró un referendo para reformar la Justicia, un proyecto impulsado por él. La consulta incluía cinco peticiones. Las tres primeras tenían que ver con la forma de elegir a los miembros del Consejo Superior de la Magistratura y de evaluarlos para la progresión en su carrera, así como con las funciones que pueden desempeñar. La cuarta petición habría limitado la aplicación de medidas cautelares antes de una sentencia y la última habría derogado la limitación de cargos públicos a los condenados por delitos por asociación mafiosa, terrorismo y contra la administración pública. Sin embargo, la participación fue demasiado baja (20,9 %) —no se alcanzó el cuórum necesario— y el referendo se convirtió en un fracaso.

El resultado electoral no supondrá un cuestionamiento del liderazgo de Meloni, pero Salvini podría tener serios problemas. Desde hace tiempo hay un fuerte descontento en su partido, y la derrota en Verona sumada al fiasco del referendo podría agravar las tensiones. «Estas elecciones demuestran que Meloni y Hermanos de Italia no son una armada invencible, pero la Liga debe cambiar», señaló a La Voz una fuente de la Liga desde el nordeste del país.

«La derecha solo gana si está unida, para liderarla necesitamos un nombre que pueda unir a todos. Salvini y Meloni causan polarización». Un candidato podría ser el gobernador de la región del Véneto, Luca Zaia, una de las caras más conocidas del partido ultraderechista. Pero es poco probable que Salvini se eche atrás sin luchar.