El candidato republicano que salga vencedor de esas primarias se enfrentará con John Fetterman, que ganó en las primarias demócratas al centrista Conor Lamb y que la noche electoral estaba en el hospital tras haber sufrido la semana pasada un ataque al corazón. Fetterman ha huido durante la campaña de aquellos que intentaban clasificarle en un extremo u otro del Partido Demócrata.
Con sus más de dos metros de altura y los brazos tatuados, tampoco tiene la apariencia de un político tradicional y ha asegurado en varias ocasiones que esa es una de sus fortalezas. En un comunicado, el presidente de EE.UU., Joe Biden, expresó este martes su apoyo por Fetterman y aseguró que el partido ahora está unido en torno a su figura.