Los votantes castigan a Johnson con la pérdida de más de 350 concejales

Juan Francisco Alonso LONDRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

El primer ministro británico, Boris Johnson, este viernes, durante una clase de dibujo en un colegio de South Ruislip
El primer ministro británico, Boris Johnson, este viernes, durante una clase de dibujo en un colegio de South Ruislip POOL | REUTERS

El Sinn Féin encabeza el escrutinio en Irlanda del Norte, con el 28 % de los votos

07 may 2022 . Actualizado a las 09:26 h.

Los británicos han expresado en las urnas su malestar con Boris Johnson. Los votantes han arrebatado a los conservadores del primer ministro más de 350 concejales y le han dado a sus rivales, en particular a los laboristas, bastiones emblemáticos en los que venían gobernando desde hacía décadas. Sin embargo, los primeros resultados oficiales de las elecciones locales de este jueves revelan que el castigo fue menos doloroso del que pronosticaban las encuestas, aunque lo suficientemente duro como para que el mandatario se deba preparar para que su liderazgo dentro de la formación gobernante sea cuestionado por sus críticos.

En Londres fue donde los tories recibieron el varapalo más contundente. En la capital no solo perdieron el distrito de Wandsworth, donde gobernaban desde 1978 y que fue el laboratorio donde la desaparecida Margaret Thatcher puso en práctica sus recetas neoliberales, sino incluso Westminster, que es donde se hallan las sedes de los ministerios, incluyendo el 10 de Downing Street, y el Parlamento. Desde que fue creado en 1964, este distrito siempre estuvo en manos conservadoras.

«Wansdworth y Westminster eran buques insignia conservadores. Se mantuvieron en nuestras manos durante la luna de miel con Blair de finales de los años noventa, durante la crisis y durante el mandato de Theresa May. Ahora, su pérdida debe hacernos reaccionar», afirmó Gavin Barwell, quien fue jefe de gabinete de May y ahora está en la Cámara de los Lores. Más contundente fue el diputado Roger Gale, quien sostuvo que los malos resultados han puesto en marcha «una marea» que se puede llevar por delante a Johnson. 

Optimismo laborista

Las victorias en Londres, así como haber conseguido 200 concejales más y seis nuevos distritos, permitieron al líder laborista, Keir Starmer, hablar de «un punto de inflexión» y de que su formación está en «la vía de ganar unas elecciones generales».

Esta visión optimista no es compartida por analistas como John Curtice, experto en temas electorales, quien recordó que los escrutinios mostraron que el partido opositor no ha podido recuperar el terreno perdido en el norte de Inglaterra. «En Londres, el laborismo ha cosechado un buen resultado, pero el problema está fuera de Londres […] Los laboristas todavía tienen una gran cantidad de trabajo por hacer, sobre todo en las partes de Inglaterra que votaron a favor de la salida de la Unión Europea», declaró Curtice a la BBC.

No obstante, los laboristas señalaron que la victoria en Southampton y los primeros datos de Escocia y de Gales, que mostraban una recuperación frente a los nacionalistas, permitirían disipar cualquier duda sobre su triunfo.

Éxito de los liberal demócratas

Quienes, sin lugar a duda, tienen motivos para celebrar los resultados son los liberal demócratas. El tercer partido más grande del Reino Unido ha conseguido más de 160 concejales y cinco nuevos ayuntamientos, lo cual parece revelar que los votantes les han perdonado su labor en el Gobierno de coalición encabezado por el tory David Cameron.

Donde las encuestas han dado en el clavo ha sido en Irlanda del Norte, pues allí el republicano Sinn Féin encabeza, con un 28 % de los votos, el escrutinio, mientras que el protestante Partido Unionista Democrático (DUP, por sus siglas en inglés) le seguía en el segundo lugar.

Los resultados en el Úlster tendrán impacto en Londres y más allá. El Gobierno de Johnson ha decidido darle una nueva oportunidad a las negociaciones con la UE sobre el Protocolo del brexit para Irlanda del Norte y los unionistas han condicionado su participación en el Ejecutivo autonómico a que se reforme o derogue el texto.

La Policía investiga si el líder laborista también se saltó el confinamiento

El líder laborista, Keir Starmer, apenas pudo disfrutar de los buenos resultados cosechados en las elecciones locales de este jueves. La Policía del condado inglés de Durham ha abierto una investigación para determinar si el año pasado Starmer se saltó el confinamiento por el covid-19 para beber unas cervezas con miembros de su partido tras celebrar un acto de campaña en la localidad de Hartlepool.

La decisión del cuerpo policial ha sorprendido, pues a principios de este año, el mismo departamento había señalado que el líder opositor no había cometido ningún delito. Sin embargo, la Policía de Durham afirma ahora que ha recibido «nueva información importante». Al parecer, se trata de unas fotografías publicadas por el diario conservador The Daily Mail, en las que se ve a Starmer bebiendo una cerveza. Este departamento policial fue el mismo que, en el 2020, rechazó procesar al entonces asesor principal del premier, Dominic Cummings, pese a que se comprobó que había viajado desde Londres a la granja de sus padres, un desplazamiento expresamente prohibido en ese momento.

En las últimas semanas miembros del Gobierno, como la ministra de Cultura, Nadine Dorries, habían criticado que el laborista no fuera sometido a un proceso similar al que pesa sobre Johnson por el llamado Partygate.