Lavrov exhibe en China la buena sintonía de Moscú con el régimen de Pekín

Luís Pousa Rodríguez
Luís Pousa REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

El ministro de Exteriores chino, Wang Yi, y su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, durante una cumbre en el 2019 en Brasil
El ministro de Exteriores chino, Wang Yi, y su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, durante una cumbre en el 2019 en Brasil RICARDO MORAES

El ministro de Exteriores ruso visita por primera vez a su homólogo chino desde el inicio de la guerra y promete un «nuevo orden mundial multipolar»

30 mar 2022 . Actualizado a las 21:07 h.

Mientras arrecia la lluvia de sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea sobre Rusia por la invasión de Ucrania, y los departamentos de Exteriores de media Europa ponen en la frontera a decenas de diplomáticos rusos acusados de espionaje, China hizo este miércoles un nuevo alarde de su buena sintonía con el régimen de Putin. Por primera vez desde el inicio de la guerra el pasado 24 de febrero, el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, viajó al gigante asiático para entrevistarse con su homólogo chino, Wang Yi. Los jefes de las diplomacias rusa y china se reunieron en la ciudad de Huangshan, en la provincia oriental de Anhui, en vísperas de una cumbre multilateral sobre Afganistán.

Wang y Lavrov exhibieron tras el encuentro el buen entendimiento entre ambas potencias, del que ya presumieron el pasado 4 de febrero en Pekín los presidentes Xi Jinping y Vladimir Putin, y que ni siquiera la agresión rusa a Ucrania ha logrado erosionar. 

Un nuevo orden

Lavrov aseguró que Moscú y Pekín trabajan de forma coordinada en su acción exterior y recalcó que ambos países son los principales motores de un cambio en las relaciones internacionales que, a su juicio, llevará a «un nuevo orden mundial multipolar». Un orden que, pese a estar liderado por dos potencias con escaso respeto a los derechos y libertades, será «más justo y democrático», según Lavrov.

El titular chino de Exteriores no ahorró elogios a Lavrov y el Gobierno ruso, aunque evitó en todo momento apoyar de forma explícita la agresión a Ucrania. Pekín ha evitado hasta ahora hablar de invasión y trata de mantener un cierto equilibrio entre las posturas enfrentadas de Moscú y Occidente. Una equidistancia imposible que al final se traduce en un respaldo con matices a Putin. Aunque el régimen chino subraya que se debe respetar la «integridad territorial» de todos los países, Ucrania incluida, tampoco duda en criticar las sanciones impuestas por Washington y Bruselas a Moscú, y califica de «compleja» una situación cuyo origen, asevera, está en «amenazas a la seguridad» de Rusia como la expansión de la OTAN hacia el este de Europa.

Aunque tanto Rusia como China lo han negado, los servicios de inteligencia de Estados Unidos han trasladado a sus aliados europeos que Putin ha solicitado a Xi que le suministre armamento para poder mantener sus operaciones en Ucrania. Por ahora, sin embargo, no hay constancia de que Pekín haya enviado material bélico a Moscú ni que le haya aportado ayuda financiera para sortear las sanciones de Occidente. 

«Cambios no vistos»

Según un comunicado del Ministerio de Exteriores chino recogido por Europa Press, Wang subrayó tras la reunión de este miércoles con Lavrov que el mundo «ha entrado en un período de turbulencia» y está inmerso actualmente en «cambios profundos no vistos en un siglo».

El ministro chino resaltó que Pekín «siempre ha apoyado que el mundo vaya hacia la multipolaridad y la democratización de las relaciones internacionales» e insistió en que China «siempre ha estado en el lado correcto de la historia».

Para Wang, «el problema de Ucrania tiene una historia y unos orígenes complejos». «No es solo el estallido de una acumulación a largo plazo de conflictos de seguridad en Europa, sino el resultado de una mentalidad de Guerra Fría y confrontación de grupo», explicó.

El jefe de la diplomacia china instó a Kiev y Moscú a avanzar en las negociaciones «pese a las dificultades», a lo que Lavrov respondió al término del encuentro que «Rusia tiene el compromiso de desescalar las tensiones» y que «continuará con las conversaciones de paz y la comunicación con la comunidad internacional».