Una cuarta parte de la población ucraniana ha huido de sus hogares en un mes de guerra

La Voz REDACCIÓN

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Colas en la estación de tren de Leópolis
Colas en la estación de tren de Leópolis Ty ONeil | E. P

Unicef estima que hay 4,3 millones de niños desplazados

25 mar 2022 . Actualizado a las 16:34 h.

La agencia de Naciones Unidas para los refugiados, Acnur, estima que ya son más de 10 millones de ucranianos -casi una cuarta parte de la población- los que han huido de sus hogares como desplazados dentro del país o refugiados fuera de sus fronteras desde el inicio de la invasión rusa el 24 de febrero. «Más de 6,5 millones de personas están desplazadas dentro de Ucrania y 3,7 millones de personas se han visto obligadas a huir del país», ha lamentado la representante de Acnur  en Ucrania, Karolina Lindholm Billing, en rueda de prensa desde Ginebra.

El Fondo de la ONU para la Infancia (Unicef) precisó esta semana que 4,3 millones de niños ya no viven en su hogar: más de la mitad de la población infantil, contando 1,8 millones de refugiados y 2,5 millones como desplazados internos.

La responsable humanitaria ha avisado además de que hay 13 millones de personas «atrapadas» en zonas de conflicto o bien «incapaces de salir debido al aumento de los riesgos de seguridad, la destrucción de puentes y carreteras, así como la falta de recursos o información sobre dónde encontrar seguridad y alojamiento».

Lindholm Billing ha lamentado profundamente que la invasión rusa ha hecho retroceder cualquier tipo de avance humanitario logrado desde el comienzo en el 2014 de la guerra en el este de Ucrania. «Estamos peor que hace ocho años», ha reconocido antes de denunciar que incluso su propio personal en Ucrania «se han convertido en desplazados, algunos de ellos por segunda o tercera vez».

Acnur ha desplazado su presencia a Dnipro, Vinnytsia, Uzhgorod, Chernivtsi y Leópolis, y trabaja también en las zonas separatistas de Donestk y Lugansk, con un personal aproximado de 154 personas. La organización sigue esforzándose en llegar a los frentes de combate en Mariúpol y Járkov «como parte de los convoyes humanitarios interinstitucionales», como el que entró la semana pasada en la ciudad de Sumi.