La reina de Inglaterra, positivo en covid-19

Juan Francisco Alonso LONDRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Isabel II el pasado mes de junio, en las carreras de caballo de Ascot
Isabel II el pasado mes de junio, en las carreras de caballo de Ascot NEIL HALL | EFE

La monarca presenta «síntomas leves y parecidos a los de un resfriado», aseguró el Palacio de Buckingham

20 feb 2022 . Actualizado a las 15:50 h.

Todas las precauciones y previsiones adoptadas para proteger a Isabel II del covid-19 han probado ser insuficientes ante el elusivo patógeno, que terminó alcanzando a la reina de Inglaterra. El Palacio de Buckingham anunció este domingo que la monarca, de 95 años, ha dado positivo por coronavirus y que «está experimentando síntomas leves parecidos a los de un resfriado».

En un intento por rebajar la gravedad de la situación la casa real ha asegurado que la soberana, que ha recibido las tres dosis de las vacunas contra el virus, «continuará desempeñado algunos deberes ligeros en el castillo de Windsor», donde además «recibirá atención médica y seguirá las instrucciones» que le le indiquen sus doctores. 

El contagio de la reina se produce una semana después de que se supiera que su hijo mayor y heredero al trono, Carlos de Inglaterra, con quien apenas horas antes había mantenido un encuentro, había dado positivo en covid por segunda vez. 

Estalla la burbuja 

Para proteger a la monarca del covid-19, la casa real adoptó un estricto protocolo, el cual incluía reducir al mínimo sus apariciones en público y recurrir a nuevas tecnologías de la comunicación para determinados actos y eventos oficiales. Así, desde el 2020 Isabel II ha celebrado decenas de videoconferencias no solo con funcionarios nacionales y extranjeros o con miembros de las organizaciones caritativas que respalda, sino que incluso ha recibido las cartas credenciales de los nuevos embajadores ante el país. Uno de los últimos en ver cumplido este trámite por esta vía fue el nuevo jefe de la legación española en Londres, José Pascual Marco, quien lo hizo el pasado martes, informó la BBC. 

No se puede olvidar que la monarca enterró a su esposo, Felipe de Edimburgo, la primavera pasada en un acto donde ni siquiera sus hijos y nietos estuvieron cerca de ella.  

En lo que va del año, el único evento con público en el que ha estado Isabel II tuvo lugar el pasado 5 de febrero, cuando recibió a un grupo reducido de vecinos de su residencia invernal de Sandringham, para iniciar los actos de celebración por sus 70 años en el trono.  

A finales del año pasado, la monarca suspendió el grueso de los actos de su agenda por recomendación de sus médicos. Una medida que, junto al hecho de verla utilizar bastón en público, provocaron una ola de rumores sobre su estado de salud

Más malas noticias 

 El anuncio de que la reina contrajo el covid-19 pone el broche a una semana plagada de malas noticias para la Familia Real británica, que se inició el domingo en la tarde, cuando se supo que el príncipe Andrés de York firmó un millonario acuerdo extrajudicial con la mujer que lo acusa de abuso sexual en Estados Unidos, para así evitar un juicio. Una decisión que reaviva las dudas sobre la inocencia del tercer hijo de la monarca. 

Menos de 72 horas después otro escándalo estallaba, pero esta vez el protagonista era el propio heredero: el Príncipe de Gales, quien conocía que la policía investigaría si él o alguien de su entorno intercedió para que el magnate saudí Mahfuz Marei Mubarak bin Mahfuz obtuviera la ciudadanía británica y honores de la reina, a cambio de una donación millonaria que hizo a una fundación que dirige el futuro rey.