Diferentes estatus
La prolongación del estatuto da protección a Guaidó frente al régimen de Maduro, pues su estatus, ya sea de «presidente interino», como lo reconoce EE.UU., o como «interlocutor privilegiado» (como lo han designado durante todo este año España y la UE) le da garantías para continuar haciendo política en Venezuela con menos riesgos.
Sin embargo, dentro de Venezuela, diversos grupos han criticado tanto a Guaidó como a la Asamblea Nacional por mantener «ficciones» sin poder real, y han señalado que la oposición venezolana corre el riesgo de «cubanizarse», es decir, de convertirse en una oposición en el exilio, con recursos, pero sin posibilidades reales de conquistar el poder, algo que el propio dirigente ha tratado de atajar. «Nicolás Maduro tiene fecha de vencimiento, desde el 2018 nos debe una elección presidencial y mi deber constitucional como presidente encargado es luchar por una elección presidencial libre», subrayó.