Tres de los heridos eran miembros de la pandilla conocida como «Trinitarios», por lo que se cree que eran el «objetivo» del ataque
02 ago 2021 . Actualizado a las 11:39 h.La violencia por armas de fuego no se detiene en Nueva York donde un tiroteo la noche del sábado dejó diez personas heridas, en un suceso, de acuerdo con la policía, relacionado con pandillas.
Según muestra un vídeo distribuido por las autoridades, dos individuos, que usaban mascarilla y sudaderas con capucha, llegaron desde una esquina de una calle en el vecindario de Corona, en Queens, sacaron las armas que llevaban oculta bajo su ropa y comenzaron a disparar a las 22.40 horas de la noche contra un grupo de personas.
Había una fiesta de cumpleaños en un restaurante cercano y la acera estaba abarrotada cuando hubo el tiroteo, que dejó ocho hombres heridos y dos mujeres, entre los 19 y 72 años de edad, de acuerdo con datos que ofreció hoy la policía durante una conferencia de prensa.
Asimismo, el cuerpo ha avanzado que tres de los heridos eran miembros de la pandilla conocida como «Trinitarios», por lo que se cree que eran el «objetivo» del ataque, mientras el resto de heridos eran transeúntes.
«Un informe preliminar muestra que dos hombres se acercaron en esa dirección (...), avanzaron hacia la multitud y dispararon en numerosas ocasiones antes de saltar sobre dos patinetes que conducían otros dos hombres y huir del lugar», ha relatado en una rueda de prensa el subdirector de la Policía del norte de Queens, Galen Frierson, informa CNN.
Buscan a cuatro personas como sospechosas y ha señalado a que se trataría de «pandilleros» que acudieron al lugar con «múltiples armas y máscaras». «Esto es inaceptables en la calles de la ciudad de Nueva York y tiene que detenerse», ha exigido el jefe de detectives de la Policía, James Essig.
El pasado 7 de julio el gobernador Andrew Cuomo decretó un estado de emergencia en Nueva York, el primer estado en la nación, por la violencia con armas de fuego.
El estado aprobó además dos legislaciones que limitan su venta y responsabilizan a sus fabricantes de las consecuencias de actos cometidos con ellas en un intento por reducir los tiroteos.