Un nuevo hallazgo eleva a 1.275 las tumbas de indígenas en internados de Canadá

La Voz REDACCIÓN

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Flores en recuerdo de los 215 niños cuyos cadáveres fueron hallados en tumbas sin identificar junto al internado para indígenas de Kamloops
Flores en recuerdo de los 215 niños cuyos cadáveres fueron hallados en tumbas sin identificar junto al internado para indígenas de Kamloops JENNIFER GAUTHIER

La tribu Penelakut, que habita la pequeña isla de Penekalut en la costa del Pacífico de Canadá, señaló en un comunicado que ha localizado más de 160 tumbas sin identificar y no documentadas

13 jul 2021 . Actualizado a las 22:11 h.

La tribu indígena Penelakut, de las islas del Golfo de Canadá, ha informado del hallazgo de más de 160 tumbas «no documentadas y sin identificar» en el área, donde entre 1890 y 1970 operó un internado de asimilación forzosa para niños indígenas.

El hallazgo se produce en el marco del descubrimiento de otras tumbas de niños sin identificar cercanas a estos internados, que funcionaron en Canadá entre los siglos XIX y XX para integrar de forma forzosa a los jóvenes indios. Estaban financiadas por el Estado y gestionadas por organizaciones religiosas, muchas vinculadas a la Iglesia católica, según informa Europa Press.

La tribu ha informado a las comunidades indígenas vecinas del descubrimiento y las ha invitado a colaborar para «crear conciencia» sobre el centro en cuestión, la escuela residencial Isla Kuper, según un texto recogido por la cadena CBC.

La líder Penelakut Joan Brown ha instado a las personas que pasaron por estos centros a contar su historia. «Es imposible superar actos de genocidio y violaciones de los Derechos Humanos», ha lamentado, antes de señalar que «la curación es un proceso continuo».

La escuela estuvo en funcionamiento entre 1890 y 1970 en la isla de Penelakut, anteriormente conocida como isla Kuper.

Ya se han hallado más de 1.100 tumbas de estas características, lo que ha levantado una polémica que llevó al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, a exigir a la Iglesia católica que «asuma su responsabilidad». Los grupos indígenas canadienses han pedido que se investiguen todos los antiguos internados del país. Durante décadas, miles de niños fueron apartados de sus familias e internados en colegios residenciales, donde debían aprender las tradiciones de los colonialistas europeos para olvidar su propia cultura, enfrentándose además a la violencia y a abusos sexuales.

«Genocidio cultural»

Una comisión de investigación concluyó en el 2015 que muchos de los menores no regresaron jamás a sus comunidades originales y reconoció así un «genocidio cultural», mientras que el Proyecto Niños Perdidos ha identificado hasta el momento a más de 4.100 menores fallecidos durante su estancia en los internados, muchos de los cuales fueron sepultados en los propios recintos escolares.