El antiguo negociador de la UE para el brexit, Michel Barnier, quiere encarnar una alternativa al anunciado duelo Macron-Le Pen en las próximas elecciones presidenciales de la primavera del 2022 en el país galo.
La mayoría de los franceses no quiere revivir este escenario y como los conservadores se ha hecho un hueco tras las regionales, Barnier piensa que tiene una oportunidad. Carece de la fuerza de reclamo de sus contrincantes conservadores, pero como nadie destaca en los sondeos, su estrategia consiste en imponerse como el hombre capaz de unir a las diversas fuerzas de la derecha.
Una fuerza colectiva
«El desafío es transformar todos los talentos que hay en una fuerza colectiva», comenta Barnier a un grupo de periodistas europeos, mientras desgrana su larga experiencia, desde la presidencia del Comité de Organización de los Juegos Olímpicos de Albertville a negociador jefe de la Unión Europea para el brexit, varias veces ministro y comisario europeo.
Michel Barnier asegura que los valores de la derecha «están hoy en el centro de gravedad de lo que desean los franceses», y recuerda con cierta coquetería que él es «más joven que Biden».