Macron y Merkel piden explicaciones a Dinamarca por el escándalo del «espionaje entre amigos» de Estados Unidos

La Voz REDACCIÓN

INTERNACIONAL

reuters

Según una investigación de varios medios europeos, Dinamarca habría consentido que Estados Unidos usara sus sistemas de telecomunicaciones para espiar a varios líderes europeos

31 may 2021 . Actualizado a las 21:59 h.

El presidente francés, Emmanuel Macron, y la canciller alemana, Angela Merkel, han apremiado este lunes a un «total esclarecimiento» del papel presuntamente desempeñado por Dinamarca en el llamado «espionaje entre amigos» de Estados Unidos sobre varios líderes europeos. «El caso se remonta a hace años. Pero si la información es cierta, no es aceptable, menos aún entre aliados europeos», afirmó Macron, tras las consultas intergubernamentales en formato virtual con Merkel, quien su expresó su «confianza» en que el Gobierno danés «aclare» lo ocurrido.

Entre socios, más entre europeos, «no puede hacer espacio para la sospecha», insistió Macron, quien indicó que su país ha pedido ya «información completa» a Dinamarca y que está a la espera de respuestas. Las relaciones entre socios se fundamentan en la «certeza y la confianza», apuntó por su parte Merkel sobre un caso que, en su momento, sacudió la sintonía con su gran aliado transatlántico al revelarse las escuchas a su teléfono móvil por parte del espionaje estadounidense.

Indignación en París, cautela en Berlín

Las nuevas revelaciones difundidas por medios daneses y alemanes este domingo apuntan a un «consentimiento» o cooperación por parte de Dinamarca con el espionaje de Estados Unidos. Mientras París ha reaccionado con indignación, Berlín ha optado por la cautela, si bien el detonante del escándalo que salió a relucir en el año 2013 fueron las escuchas al teléfono móvil de Merkel.

Antes de la reunión entre la canciller y Macron, el secretario de Estado francés de Asuntos Europeos, Clément Beaune, había afirmado que, de demostrarse esa convivencia, el asunto sería «extremadamente grave». El portavoz de Merkel, Steffen Seibert, fue menos contundente: afirmó que su Gobierno «tomaba nota» del caso y que los estamentos competentes están sobre el asunto, a escala nacional e internacional.

Escuchas ilegales a Merkel

Las informaciones periodísticas apuntan a que Dinamarca consintió que Estados Unidos usara sus sistemas de telecomunicaciones para espiar a los líderes europeos. La sospechas se centran en las escuchas ilegales de la Agencia Nacional de Seguridad estadounidense (NSA), entre el 2012 y el 2014, que afectaron a Merkel, al exministro de Exteriores y ahora presidente, Frank-Walter Steinmeier, así como a otros dirigentes de Francia, Suecia y Noruega. Los medios implicados en la investigación se remiten a nueve fuentes con acceso a material clasificado del servicio de inteligencia de Defensa danés.

El escándalo por el espionaje «amigo» que Estados Unidos utilizó contra Merkel y otros líderes salió a relucir en el 2013 y empañó las relaciones entre los dos grandes aliados transatlánticos, Berlín y Washington. Merkel expresó ya su malestar al entonces presidente, Barack Obama, por lo que tachó de «inaceptable espionaje entre amigos». Sucesivas revelaciones periodísticas sacaron a la luz esas prácticas, que la NSA había estado llevando a cabo desde los 90 y que afectaron a otros líderes y al Banco Central Europeo (BCE).