Biden sitúa a Harris al frente de la crisis migratoria en la frontera con México
INTERNACIONAL
La Casa Blanca busca la colaboración de los países de Centroamérica
24 mar 2021 . Actualizado a las 22:05 h.El presidente de EE.UU., Joe Biden, se ha puesto manos a la obra para afrontar la caótica situación migratoria de la frontera con México, después de semanas de pasar de lado por la primera gran crisis de su mandato. «Vamos a necesitar ayuda», confesó Biden, tras la primera reunión de su Gabinete convocada el miércoles en la Casa Blanca para hacer frente a la ola de indocumentados.
El mandatario reveló que la estrategia de su Administración pasa por implicar a México, Honduras, Guatemala y El Salvador, países de origen de los solicitantes de asilo, en el control de sus propias fronteras, mientras lidia con las miles de personas que están hacinadas en los centros de detención en suelo estadounidense.
La vicepresidenta Kamala Harris se convertirá en la persona clave para tratar de frenar la ola migratoria y fortalecer la colaboración con los vecinos del sur. «Cuando ella hable, hablará por mí y no tiene que consultarlo antes conmigo», afirmó Biden, que como vicepresidente de Barack Obama asumió un papel similar.
Harris, por su parte, comenzó su misión reconociendo que el país se enfrenta a un «desafío» y reiteró las peticiones a los inmigrantes para que no viajen a la frontera. La vicepresidenta tratará ahora de negociar ayudas económicas a los países del Triángulo Norte para combatir la corrupción, mejorar la economía y fortalecer sus instituciones, a cambio de contener los flujos migratorios en sus territorios. Biden trata de aplacar así las críticas por su inacción ante una potencial tragedia humanitaria causada por el efecto llamada de sus políticas de inmigración tras cuatro años de mano dura de Donald Trump.
Mientras el presidente se dedicaba a promocionar la ayuda económica contra la crisis del coronavirus, la vacunación y el plan de infraestructuras, más de 100.000 inmigrantes cruzaron la frontera en febrero, un 28% más que el mes anterior. Cerca de 15.000 fueron menores no acompañados. El primer movimiento de Biden fue buscar el respaldo de México con el envío de una delegación encabezada por la exembajadora en México Roberta Jacobson. El encuentro acabó con un acuerdo inicial de colaboración, mientras el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, reclama más esfuerzos económicos a Washington.
La delegación viajará ahora a Guatemala. El compromiso de la nueva Administración es, por el momento, destinar 4.000 millones de dólares a Centroamérica. La mayoría del presupuesto está destinado los afectados por los huracanes del pasado otoño, que desencadenaron la ola migratoria, lo que sirvió a Biden para decir ayer que todo comenzó bajo el mandato de Trump.