Trump se reivindica como el jefe del Partido Republicano

La Voz

INTERNACIONAL

El expresidente de Estados Unidos Donald Trump con su esposa
El expresidente de Estados Unidos Donald Trump con su esposa Leah Millis

El expresidente de Estados Unidos insiste en que hubo fraude electoral en su reaparición pública en Florida

01 mar 2021 . Actualizado a las 18:10 h.

En su primera aparición pública tras dejar la Casa Blanca, Donald Trump ha dejado claro este domingo que el «trumpismo» está lejos de acabar, que él sigue siendo el jefe de los republicanos, dejando a un lado su proyecto de crear un nuevo partido, y que su derrota en las presidenciales se debió a un fraude electoral

No confirmó su presencia en las elecciones presidenciales del 2024, pero la dio por hecha, durante su intervención en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) en la ciudad de Orlando, en el centro de Florida. Su discurso y la venta de camisetas de «Trump 2024» sonaron a campaña. «¿Quién sabe? Puede que decida derrotarles en una tercera ocasión», indicó dando por hecho que él fue el ganador de las del 2020..

En enero la prensa estadounidense informó de las especulaciones del entorno de Trump sobre la formación de un nuevo partido político e incluso salió a la luz su nombre, el Partido Patriótico. El domingo dijo que todo eran «noticias falsas». «Tenemos el Partido Republicano. Va a unirse y va a ser más fuerte que nunca. No voy a comenzar con un partido nuevo», ha insistido. «¿No sería brillante? Hagamos un nuevo partido y dividamos el voto para que no podamos ganar nunca. No. No nos interesa», ha ironizado.

El único presidente de Estados Unidos que ha enfrentado dos juicios políticos en su gobierno y que enfrenta ahora varios casos criminales en las cortes judiciales, clausuró así la CPAC 2021, un foro que durante cuatro días estuvo alineado con sus políticas y teorías de la conspiración.

Los trumpistas escucharon lo que querían escuchar de su líder y demás expositores, que Biden «hizo trampa» y perdió. Algunos asistentes incluso pidieron con carteles en las afueras del hotel donde se realizó el foro un «juicio político» para el demócrata, informa Efe.

Adentro, la mayor ovación se la llevó el senador Josh Hawley al recordarle a la audiencia que él se negó a certificar la victoria de Biden el día del asalto al Capitolio por parte de trumpistas, el pasado 6 de enero, con un saldo de cinco muertos.

Oradores, público y Trump retaron así la legalidad de los resultados electorales de noviembre, menospreciaron a la prensa y a las compañías tecnológicas que «cancelaron» al expresidente en las redes sociales.

«No importa cuánto el establecimiento de Washington y los poderosos intereses especiales quieran silenciarnos, que no quede ninguna duda, saldremos victoriosos y Estados Unidos será más fuerte y más grande que nunca», subrayó Trump.

Aseguró que Biden se está aprovechando de las vacunas que él impulsó contra el «virus chino» y del «plan de distribución» que el dejó durante su mandato, y volvió a burlarse del uso de mascarillas.

Con una máscara de gas acudió al foro Erik Svane, quien dijo a Efe que así estarán todos a finales del 2021 si obedecen las políticas de Biden.

Ante un público eufórico, «el presidente 45 de EE.UU.», la denominación que ha adoptado el partido en aparente rechazo a la de «expresidente», Trump y decenas de ponentes celebraron las menores restricciones de Florida durante la pandemia que facilitó acoger el foro que suele realizarse en Maryland.

Grandes ausentes

El mayor foro de conservadurismo del país tuvo grandes ausentes. Entre ellos el propio exvicepresidente Mike Pence y la ex embajadora ante la ONU Nikki Haley, como también el senador Rand Paul, que declinaron la invitación.

A la CPAC no fueron invitados aquellos considerados sus detractores, como los senadores Mitt Romney y Mitch McConnell, este último su gran aliado político y clave para su absolución en el Senado en el juicio político por el ataque al Capitolio, pero que sin embargo dijo que el asunto no terminaba ahí para Trump.

Los republicanos de ayer y el jefe

La conferencia de cuatro días derivó contra el statu quo republicano, como calificó Trump a McConnell tras el juicio político. «Donald Trump no se va a ir a ningún lado», aseguró el senador Ted Cruz.

«No podemos, no volveremos, a los días del fallido establecimiento republicano de antaño», dijo por su parte el gobernador de Florida, Ron DeSantis. Minutos antes de que Trump subiera al podio, la CPAC reveló resultados de los sondeos de la conferencia en la que el expresidente tuvo un 55 % de preferencia si las elecciones fueran hoy, seguido por DeSantis, con el 21 %.

«Deberíamos unirnos como conservadores y seguir adelante con los notables logros del expresidente Trump», subrayó Larry Kudlow, su principal asesor económico, que lo llamó «el jefe» del partido.

Pero, por ahora, la recuperación de la mayoría en el Congreso en  el 2022 es la meta de Trump, que desde el pasado 20 de enero reside en su club Mar-a-Lago de Palm Beach (Florida), donde ha recibido la visita de aspirantes en busca de su bendición. 

«Si quieren acabar con el socialismo en este país ganen cinco sillas en la Cámara de Representantes», pidió a la audiencia Kevin McCarthy, líder de la minoría republicana de esa cámara. Es «la menor mayoría que han tenido los demócratas en cien años, podemos hacerlo», agregó el aliado de Trump.

En el acto han participado varias figuras del sector conservador estadounidense como el director ejecutivo de la empresa alimentaria Goya, Robert Unanue, quien se ha referido a Trump como «el presidente auténtico, legítimo y aún presidente de Estados Unidos».

En cambio, el senador republicano Bill Cassidy, quien votó a favor de condenar a Trump en el juicio político abierto por el asalto al Capitolio ha afirmado que no cree que Trump pueda ser candidato del Partido Republicano en el 2024.

Trump hizo una revisión de su Gobierno de cuatro años y de la que llamó «incompetencia» de la nueva Administración. Atacó especialmente las nuevas políticas migratorias al señalar que Biden reabrió el negocio de los coyotes y un masivo flujo de indocumentados.