La pandemia obliga, por segunda vez, a Francia a aplazar unas elecciones, esta vez las regionales

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

El presidente Emmanuel Macron
El presidente Emmanuel Macron GONZALO FUENTES | Reuters

El Senado ha aprobado atrasar a junio los comicios previstos para marzo

27 ene 2021 . Actualizado a las 22:01 h.

La pandemia ha obligado a Francia a aplazar por segunda vez unas elecciones. El Senado ha aprobado un proyecto de ley para aplazar a junio los comicios regionales, previstos para marzo, a causa del coronavirus, según anunció el órgano legislativo a través de su cuenta en Twitter. El pasado año, la segunda vuelta de las municipales fueron pospuestas de marzo a junio.

«El Senado aprobó en primera lectura el proyecto de ley que pospone las elecciones departamentales y regionales», indicó, antes de detallar en su web que el proyecto de ley aplaza además a diciembre del 2027 las regionales posteriores, que estaban previstas para marzo del 2027. La Cámara Alta señaló que «el consejo científico deberá enviar al Parlamento, antes del 1 de abril, un informe pronunciándose sobre el estado de la pandemia de covid-19 y sobre los riesgos sanitarios vinculados a la celebración de estas votaciones y la campaña electoral precedente», según recoge Europa Press.

Las autoridades francesas indicaron el martes que durante las 24 horas previas se habían detectado 22.086 casos y 352 fallecidos por coronavirus.

Juicio contra Benalla

Ayer se conoció asimismo que Alexandre Benalla, el que fuera guardaespaldas de confianza del presidente francés, Emmanuel Macron, hasta su salida del Elíseo por un escándalo de uso desproporcionado de la violencia en el 2018, será juzgado por falsificación de documentos y por el uso indebido de sus pasaportes diplomáticos. Según indicaron medios locales y recoge Efe, Benalla tendrá que sentarse en el banquillo de los acusados en el Tribunal Correccional por vez primera, aunque tiene otras cinco investigaciones pendientes.

Los jueces instructores determinaron el lunes que el guardaespaldas, que en la actualidad tiene 30 años, pudo usar de forma fraudulenta sus pasaportes diplomáticos una vez que salió del Elíseo en el verano del 2018. Lo hizo para viajar a África y a Israel dentro de su proyecto de reconversión en asesor de seguridad internacional, tras dejar de ser el hombre de confianza de Macron.