Las elecciones a la alcaldía de Buenos Aires causan dudas sobre la sucesión de la presidenta

c. o. redaccióN / la voz

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David Fernández | Efe

Las encuestas predecían una ventaja de 10 puntos del candidato conservador sobre su adversario, pero el delfín de Macri tuvo que conformarse con el 51,6 % de los votos

21 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La victoria del candidato de Propuesta Republicana (PRO), Horacio Rodríguez Larreta, en la segunda vuelta de las elecciones a la alcaldía de Buenos Aires por un margen considerablemente más estrecho de lo que vaticinaban las encuestas ha despertado incertidumbre sobre las aspiraciones del líder de este partido, Mauricio Macri, a suceder a Cristina Fernández en la jefatura del Estado.

Las encuestas predecían una ventaja de 10 puntos del candidato conservador sobre su adversario, pero el delfín de Macri tuvo que conformarse con el 51,6 % de los votos. Solo 3,2 puntos más que Martín Lousteau (Energía Ciudadana Organizada, ECO) darán al PRO su tercer mandato consecutivo en la capital, tras unos comicios con una participación del 69,6 % de los que el candidato del oficialista Frente para la Victoria (FPV), Mariano Recalde, fue apeado en la primera vuelta.

Lousteau, exministro de Economía de Fernández, encabezaba una coalición centrista integrada por desde socialdemócratas y socialistas hasta conservadores moderados que presenta con el PRO un frente opositor para las presidenciales, para las que se celebra primarias abiertas el 9 de agosto. Los analistas explican que Lousteau capitalizó los votos de Recalde, a pesar de que el FPV no apoyó a ninguno de los dos candidatos.

Macri, el opositor mejor posicionado de cara a las presidenciales del 25 de octubre, celebró con poco entusiasmo el triunfo junto al ganador y, pasando por alto lo estrecho del resultado, aprovechó la euforia de la victoria para impulsar su candidatura. El candidato del PRO sorprendió al prometer que, de llegar a la presidencia, mantendrá las políticas sociales del actual Gobierno, como la asignación universal por hijo, y que Aerolíneas Argentinas e YPF, que fueron nacionalizadas por Cristina, seguirán manejadas por el Estado.