El presidente de Irán y Biden apuestan por salvar el acuerdo nuclear

Mikel Ayestaran JERUSALÉN / COLPISA

INTERNACIONAL

El presidente iraní, Hasán Rohaní
El presidente iraní, Hasán Rohaní Europa Press

Rohani se opone a la decisión tomada horas antes por el Parlamento de Teherán de prohibir las inspecciones y aumentar el enriquecimiento de uranio

04 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

A falta de contactos directos, Hasan Rohaní y Joe Biden se envían sus primeros mensajes a través de los medios y redes sociales para intentar salvar el acuerdo nuclear. Veinticuatro horas después de que el Parlamento en Teherán diera su aprobación preliminar a una ley para poner fin a las inspecciones de las instalaciones nucleares, el presidente Hasán Rohaní mostró su oposición a esta decisión de la Cámara y su ministro de Exteriores, Javad Zarif, tendió la mano a la nueva Administración estadounidense para volver al acuerdo nuclear firmado en el  2015, pero le dejó claro que «no renegociaremos un acuerdo que ya negociamos». En declaraciones al diario The New York Times, Biden admitió que «va a ser difícil», pero insistió en que su intención es ofrecer a Irán un «camino creíble de regreso a la diplomacia».

El Parlamento iraní reaccionó al asesinato del científico nuclear Mohsen Fajrizadeh con la aprobación de una ley para limitar el trabajo de los investigadores del Organismo Internacional de la  Energía Atómica (OIEA) si en un plazo de dos meses no se levantan las sanciones. Se trata de una medida simbólica ya que la Cámara no tiene autoridad sobre la política nuclear del país, que es competencia del Consejo de Seguridad Nacional. En todo caso, Rohaní criticó ese acuerdo parlamentario «porque va en detrimento de la vía de las actividades diplomáticas». El clérigo moderado basó su victoria en las urnas en los dos últimos comicios en los beneficios que este acuerdo debía reportar al país, pero los últimos cuatro años de Donald Trump y de sanciones han hundido la economía de la república islámica.

Pendientes de elecciones

Al tándem formado por Rohaní y Zarif, artífices del acuerdo nuclear firmado en el 2015 cuando Barack Obama estaba en la Casa Blanca y Biden era su número dos, le quedan apenas seis meses para intentar resucitar el acuerdo. Irán celebra elecciones en junio y todo apunta a que, como ocurrió en los comicios legislativos, se imponga la corriente ultraconservadora. La cuenta atrás está en marcha y Biden sabe que deberá afrontar con rapidez la situación. «Se habla mucho sobre misiles de precisión y toda una gama de otras cosas que están desestabilizando la región... pero la mejor manera de lograr cierta estabilidad » es lidiar «con el programa nuclear» de Teherán, según declaró el próximo presidente estadounidense en la entrevista concedida al citado diario neoyorquino.

El responsable de Exteriores iraní recogió el guante de Biden y le pidió dejar atrás para siempre «la política deshonesta» de su antecesor. Pese a que los iraníes cumplían todo lo pactado, según los informes del OIEA, Trump se retiró de manera unilateral del acuerdo en el 2018 y volvió a imponer sanciones. Ante las exigencias que planteaba Trump sobre la necesidad de extender los términos del acuerdo al programa balístico, el diplomático iraní fue claro y dijo que «Estados Unidos debe cesar sus violaciones del derecho internacional. No se requiere ninguna otra negociación». Y respecto a la imposición de castigos, Irán ha dado una serie de pasos que le alejan del texto acordado, pero desde el Gobierno insisten en que son reversibles y volverán a respetar todo lo pactado en cuanto Washington retire las sanciones.