Pese a su derrota por más de 8 millones de votos frente al demócrata Joe Biden, Trump continuó asegurando frente a los asistentes que ganó las elecciones y que los resultados han sido «manipulados» en su contra, pocas horas después de que el fiscal general, William Barr, asegurara que no existe prueba alguna del presunto fraude.
Su futuro es aún una incógnita. Pero Trump mantiene el suspense sobre si asistirá o no a la toma de posesión de Biden el próximo 20 de enero en Washington. «Sé cuál es la respuesta a esa pregunta pero no quiero decirla todavía», dijo hace cuatro días a la prensa. «No voy a especular sobre eso», zanjó ayer su portavoz Kayleigh McEnany, en una comparecencia ante la prensa.
El martes, la cadena NBC aseguró que Trump planea un evento paralelo a la ceremonia de juramento del demócrata, donde presentaría su candidatura a los comicios del 2024. Según tres personas familiarizadas con las conversaciones, existe una organización «preliminar» en marcha, aunque todavía no se ha tomado una decisión final e incluso podría anunciarlo antes. Por más que intente dibujar un futuro como candidato presidencial, los problemas financieros y legales que le esperan fuera de Washington serán un obstáculo al apoyo del Partido Republicano.