El nuevo embajador de Estados Unidos en Caracas ejercerá desde Bogotá

Pedro García Otero CARACAS / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

El vicepresidente venezolano Diosdado Cabello
El vicepresidente venezolano Diosdado Cabello Miguel Gutiérrez | Efe

Diosdado Cabello, número dos del chavismo, acusa a Felipe González de «querer un golpe de Estado en Venezuela»

19 nov 2020 . Actualizado a las 21:21 h.

No ejercerá en Caracas mientras Nicolás Maduro esté en el poder, y es designado en un momento particularmente delicado de la política interior estadounidense, pero durante los próximos cuatro años, James Story, será, desde su despacho en Bogotá, el embajador de Estados Unidos para Venezuela.

La embajada de EE.UU. en la capital venezolana se encuentra cerrada desde el 2019, cuando ambos países rompieron relaciones, después del reconocimiento del país norteamericano a Juan Guaidó, presidente del Parlamento, como mandatario interino de Venezuela. De hecho, hace más de una década que no hay intercambio de embajadores entre ambos países.

Desde entonces, Story, que hasta este miércoles era el encargado de negocios de Estados Unidos en Venezuela, se había ocupado de las relaciones entre ambos países desde la capital de la vecina Colombia. El proceso de su designación como máximo representante diplomático comenzó hace tres meses. 

Propuesta de transición

Story ha señalado repetidamente que en los próximos meses espera poder ejercer su cargo desde la capital venezolana. Es un firme defensor del llamado Marco de Transición Democrática que el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, presentó en marzo.

El nuevo embajador estadounidense para Venezuela también ha respaldado la convocatoria de una consulta popular propuesta por la Asamblea Nacional y que coincidirá con las elecciones parlamentarias que organiza el régimen de Nicolás Maduro y que ni EE.UU. ni la Unión Europea reconocen por carecer de mínimas condiciones democráticas.

La designación de Story parece confirmar, en todo caso, que las diferencias entre la Administración de Donald Trump y la próxima, de Joe Biden, son solo de matiz en relación con el problema venezolano. 

Cabello ataca a Felipe González

Por otra parte, el número dos del chavismo, Diosdado Cabello, acusó al expresidente del Gobierno español Felipe González de «querer un golpe de Estado en Venezuela», para así «poder hacer negocios» con quienes lleguen a detentar el poder.

Cabello confrontó a González, que mantiene una línea dura de defensa de la oposición venezolana, con el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, a quien, por el contrario, felicitó «por su posición para facilitar el diálogo».

«No es que Zapatero apoye a Maduro», aclaró, en todo caso, Cabello, tocando una tecla sensible. La oposición venezolana ha llegado a acusar al también exjefe de Gobierno español de ser «el verdadero canciller del chavismo» y lo ha denunciado por su cercanía, desde la Moncloa, con el régimen venezolano, incluyendo la supuesta trama de corrupción de su exembajador en Caracas, Raúl Morodo, actualmente acusado de haber recibido sobornos de la petrolera estatal venezolana, PDVSA.