El voto anticipado ya supera los 71 millones, el 50 % del total del 2016

e. b. NUEVA YORK / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

TOM BRENNER | Reuters

La pandemia de coronavirus ha creado una demanda sin precedentes en la votación adelantada tanto por correo como en persona

29 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Pase lo que pase el próximo martes, las elecciones presidenciales en las que se baten Donald Trump y Joe Biden ya han hecho historia por la movilización del voto anticipado. Más de 71 millones de estadounidenses han votado a seis días de los comicios, lo que supone más del 50 % del total de 136 millones de papeletas depositadas en el 2016, según los datos del Proyecto Electoral de Estados Unidos publicados ayer.

La pandemia de coronavirus ha creado una demanda sin precedentes en la votación anticipada tanto por correo como en persona. El miedo al contagio se ha unido al temor a los posibles problemas en el recuento de votos durante la noche electoral azuzado por el presidente Trump. «Estoy aquí para evitar las colas del día 3 y porque no me fio del servicio postal», contaba Elba García, una jubilada de origen puertorriqueño a las puertas de un colegio electoral de Williamsburg (Brooklyn).

Fecha límite

El voto por correo suma 48 millones. Su recuento implica un proceso laborioso en el que cada estado tiene sus propias reglas. Algunos solo aceptan votos hasta el día de las elecciones, mientras otros siguen contándolos hasta 10 días después. Las papeletas en persona se cuentan de forma automática y alcanzan los 23 millones a seis días del día D.

A pesar de que Biden adelanta a Trump con casi 8 puntos en las encuestas, es difícil prever a quién beneficia esta movilización del voto. Las cifras arrojan varias pistas a favor del demócrata. Los jóvenes de entre 19 y 29 años representan el 22 % de los votos anticipados, lo que augura una participación récord que beneficiará a Biden. Por otro lado, casi la mitad de las papeletas se acumulan en estados clave como Florida, Pensilvania o Carolina del Norte, donde Trump ganó hace cuatro años por la mínima.

La sorpresa la puede dar Texas, bastión republicano desde hace décadas, donde la participación alcanza ya el 86,9 % del total del año 2016, con un total de 1,9 millones de nuevos votantes registrados, y a pesar de los intentos del gobernador, el republicano Greg Abbott, por dificultar el sufragio no presencial. El tiempo se agota, así que tanto republicanos como demócratas han comenzado a pedir sus electores que renuncien a enviar las papeletas por correo y acudan a las urnas el próximo martes.