Acortan diez meses la condena al preso que redujo al atacante que asesinó a dos personas en el puente de Londres

LA VOZ REDACCIÓN / AGENCIAS

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Una señal del metro londinense dibujada con tiza muestra el mensaje «Juntos no tenemos miedo» sobre la calzada en la plaza de Trafalgar en Londres no lejos del Parlamento donde se produjo el ataque terrorista.
Una señal del metro londinense dibujada con tiza muestra el mensaje «Juntos no tenemos miedo» sobre la calzada en la plaza de Trafalgar en Londres no lejos del Parlamento donde se produjo el ataque terrorista. HANNAH MCKAY | Efe

Cumplía 17 años de cárcel por matar a un bombero en una pelea frente a un pub de Hull

18 oct 2020 . Actualizado a las 17:58 h.

El preso que ayudó a reducir al terrorista que mató a dos personas en las inmediaciones del puente de Londres el pasado noviembre verá su condena reducida en diez meses por su «valiente» acción, ha informado el Ministerio de Justicia del Reino Unido.

Steven Gallant, de 42 años, fue sentenciado a 17 años de prisión en el 2005 por matar frente a un pub de Hull al bombero Barrie Jackson, de 33.

El pasado 29 de noviembre, Gallant había salido de la cárcel con un permiso para asistir a una conferencia sobre rehabilitación de presos en el edificio Fishmongers' Hall, junto al río Támesis.

Durante ese evento, Usman Khan, condenado previamente por haber planeado un atentado contra la Bolsa de Londres, apuñaló de muerte a dos de los organizadores de la conferencia.

Gallant utilizó un gran colmillo de narval ornamental que estaba colgado en una de las paredes de la sala para perseguir al atacante hasta el puente de Londres, donde fue abatido a tiros por la policía.

Tras evaluar esa actuación, el Ministerio de Justicia ha avanzado en diez meses la tramitación de su petición de libertad condicional «en reconocimiento a su extraordinaria y valiente acción».

La familia del bombero asesinado por Gallant ha avalado esa decisión, según el diario The Guardian. El hijo de Jackson, de 21 años, afirmó al periódico: «Siento emociones encontradas, pero lo que ocurrió en el puente de Londres demuestra que realmente las personas pueden cambiar».