Biden condiciona el próximo debate con Trump a que no tenga covid-19
INTERNACIONAL
Putin lamentó ayer la «grave retórica antirrusa» del candidato demócrata
08 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Donald Trump está dispuesto a continuar la batalla electoral cuanto antes, aunque apenas fue dado de alta del hospital este lunes, después de haber anunciado su contagio de coronavirus cuatro días antes. El presidente quiere acudir al próximo debate electoral, programado inicialmente el jueves día 15 en Miami. Pero la cita podría no celebrarse. El candidato demócrata, Joe Biden, no está dispuesto a presentarse si Trump continúa siendo transmisor del virus.
«Creo que si todavía tiene covid, no deberíamos tener un debate», señaló el martes por la tarde el adversario en las urnas del magnate .«Vamos a tener que seguir normas muy estrictas. Hay mucha gente que se ha infectado. Es un problema muy serio», añadió el aspirante demócrata.
Al menos una treintena de personas del círculo más cercano de Trump han sido recientemente contagiados con coronavirus. En la campaña del candidato demócrata existe malestar, debido a que varios miembros de la comitiva presidencial rechazaron usar mascarilla en el anterior cara a cara, celebrado el martes 29 de septiembre. «Solo espero que se sigan los protocolos», pidió el demócrata, mientras que los asesores de Trump decían que el presidente estaría en la cita.
El equipo médico del líder norteamericano señaló ayer, mediante un memorando, que el magnate no había presentado síntomas de covid-19 en las últimas 24 horas y que no había tenido fiebre desde el viernes.
Normativa sanitaria
Las reglas del centro de control de enfermedades de Estados Unidos permiten a una persona dejar el aislamiento 10 días después de haber resultado positivo en un test, siempre que no haya tenido síntomas en las 24 horas previas. Ese espacio de tiempo se extiende a 20 días en casos donde las afecciones hayan sido severas. Está por ver en qué categoría se clasifica a Trump. El presidente necesitó oxígeno en dos ocasiones y tomó esteroides que se suelen utilizar en casos severos, dijeron ayer especialistas a la prensa estadounidense.
El debate de ayer entre el republicano Mike Pence y la demócrata Kamala Harris, candidatos a la vicepresidencia, fue una prueba de fuego para futuros cara a cara entre los aspirantes a la presidencia.
Los asesores de Harris reclamaron a la comisión de debates que los postulantes a la vicepresidencia estuvieran separados por dos pantallas de plexiglás. Además, estaba previsto que ambos candidatos debatieran casi al doble de distancia que la establecida para el anterior encuentro entre Trump y Biden. El equipo de Pence acató las propuestas.
Medidas de estímulo
Por otro lado, ayer fue cuestionado un aparente comportamiento errático del presidente en lo relativo a las negociaciones de las medidas de estímulo económico contra los efectos de la pandemia. Republicanos y demócratas no se ponen de acuerdo en las cifras. La Casa Blanca quiere un paquete por valor de unos 1,6 billones de dólares, mientras los demócratas buscan medidas por más de dos billones.
El presidente decidió cancelar las negociaciones el martes, pero, con la Bolsa bajando, dio marcha atrás unas pocas horas después y, a través de Twitter, dijo estar dispuesto a aprobar medidas como cheques a los ciudadanos e inyecciones de dinero a las maltrechas aerolíneas del país.
La campaña presidencial continúa, asimismo, siendo muy seguida desde el extranjero. El presidente de Rusia, Vladimir Putin, puso ayer distancia con el candidato demócrata. Cree que Biden tiene una «grave retórica antirrusa», mientras alaba el impulso a las relaciones entre ambos países llevado a cabo por Donald Trump, aunque dijo estar dispuesto a trabajar con «cualquier futuro presidente» de EE.UU. «Nosotros somos observadores externos, no interferimos», aclaró el líder ruso.