Cae un gran abogado asesor de Boris Johnson ilustrando el cambio conservador

Iñigo Gurruchaga COLPISA | LONDRES

INTERNACIONAL

Boris Johnson.
Boris Johnson. Kay Nietfeld / dpa

El primer ministro ya habría pactado una enmienda a su polémica ley del «brexit» con parlamentarios disidentes de su partido

17 sep 2020 . Actualizado a las 11:58 h.

El Abogado General de Escocia, que asesora al Gobierno de Reino Unido sobre asuntos legales, ha dimitido tras mantener contradicciones públicas con el ministro de Irlanda del Norte y la Abogada General del Estado. En su carta de renuncia, Richard Keen escribe a Boris Johnson: «En los últimos días me ha resultado muy difícil reconciliar mis obligaciones como oficial de la ley y sus intenciones políticas con la Ley del Mercado Interno».

Keen, uno de los abogados más prestigiosos y más ricos de Escocia, ya había perdido el argumento con la Abogada General del Estado, Suella Braverman, durante la preparación del proyecto de dicha norma y, que también causó la dimisión del director del servicio de abogados del Gobierno. El escocés defendió que los ministros incumplirían su código ético, en caso de tomar parte en la decisión de quebrar el Acuerdo de Retirada, pero fue desoído.

Afirma también en su carta de dimisión que ha intentado presentar «un argumento respetable» en defensa de la nueva ley de Johnson. Así, el martes dijo al Comité de Justicia de la Cámara de los Lores que el polémico texto es solo un vehículo para una situación de urgencia, que complementaría el Artículo 16 del Protocolo irlandés y permite la intervención unilateral de Reino Unido o la Unión Europea en caso de existir un riesgo de daño persistente a la economía o la sociedad norirlandesa.

Para lord Keen, la norma de Johnson tampoco incumple la Convención de Viena sobre Tratados Internacionales, dado que permitiría quebrar esos pactos cuando existe un cambio fundamental en las circunstancias con respecto a las existentes en el momento de su firma. Sin embargo, varios bogados y académicos afirman que, en sus dos intentos de presentar un argumento respetable, Keen recurre al artificio. Pero su problema principal era otro.

Poder «brexiter»

Braverman, cuyo texto oficial de justificación de la legalidad del proyecto de Johnson ha sido calificado como vergonzoso por prominentes académicos, habría participado también en la redacción de lo que debía decir, el lunes, el propio ministro para Irlanda del Norte, Brandon Lewis. Sería cuando le preguntasen en el Parlamento, en la primera ocasión para un miembro del Gabinete de Johnson de hablar sobre este tema, si el Gobierno proponía quebrar la legislación internacional. Sí, pero de una manera «específica y limitada», respondió de forma escueta.

Lord Keen también fue cuestionado en el pleno de la Cámara de los Lores, el martes por la tarde, sobre el contraste entre lo que él había afirmado el martes por la mañana y Lewis el lunes. Y el abogado escocés replicó sin ambages que su colega «había contestado a la pregunta equivocada». Los ayudantes del Gobierno se apresuraron entonces, ya sin sentido del humor, a defender al ministro Lewis y él mismo afirmó este miércoles ante el Comité de Irlanda del Norte que él respondió «a la pregunta correcta».

Se va del Gobierno ahora Lord Keen, expresidente del Partido Conservador en Escocia y el abogado quizás más brillante del actual Ejecutivo británico, y triunfa de nuevo Braverman, letrada de mucho menor rango profesional que los dimitidos pero firme «brexiter». Es otro paso en la transformación de los conservadores británicos. Y es, además, una saga con desenlace triste para Johnson, que intentó evitar la dimisión. No obstante, el 'premier' ya habría pactado la enmienda a su controvertida ley con los disidentes conservadores.