Rompe así su silencio tras la creciente presión pública para que respondiera a la denuncia de Tara Reade por unos hechos ocurridos en 1993
02 may 2020 . Actualizado a las 10:27 h.Joe Biden ha optado por romper su silencio y salir al paso de una acusación de abuso sexual que amenaza con amargar su candidatura a la Casa Blanca en plena era del movimiento #MeToo. «Quiero encarar las acusaciones de una antigua empleada de que tuve una conducta inapropiada hace 27 años. No son verdad. Nunca ocurrió», dijo Biden, de 77 años, en un comunicado en el que defiende que, a lo largo de su carrera política, ha demostrado su compromiso para combatir la violencia contra las mujeres y perseguir abusos como los que se le imputa ahora. «Lo digo inequívocamente: nunca, nunca sucedió», repitió el que fuera vicepresidente con Barack Obama en el programa Morning Joe, de la MSNBC, según informa Efe
Durante la entrevista el virtual rival de Donald Trump en noviembre pidió también que se busque en los archivos del Senado cualquier registro de una denuncia o una queja que Tara Reade hubiera presentado entonces sobre esas alegaciones. Hace 21 días que la mujer puso en una comisaría de Washington una denuncia por un abuso sexual ocurrido en 1993, cuando formaba parte del equipo del entonces senador. Pero también asegura que cuando ocurrieron los hechos los puso en conocimiento del comité interno de la Cámara Alta. Según su relato, Reade y Biden estaban solos en un edificio de oficinas del Senado cuando Biden la acorraló contra una pared, la manoseó por debajo de la ropa y la penetró con sus dedos.
Reade es una de las ocho mujeres que el año pasado ya acusaron a Biden de tocamientos, besos o abrazos inapropiados. Entonces el demócrata publicó un vídeo en el que, sin llegar a disculparse, explicó que sus gestos eran «de apoyo y ánimo» y que estos nuevos tiempos se comprometía a ser «más consciente y respetuoso con el espacio personal».
«Los medios de comunicación responsables deberían examinar y evaluar el historial completo y creciente de inconsistencias en su historia, que ha cambiado de manera repetida», aseguró Biden, además de apuntar que divulgó la acusación después de que anunciara su candidatura.
Cuando la entrevistadora de MSNBC Mika Brezezinski le recordó que en el caso de Brett Kavanaugh, propuesto por Trump como juez del Supremo, él mismo había declarado que se debe prestar crédito a las mujeres que denuncian casos de violencia sexual, el exvicepresidente no fue tan categórico. «Para que una mujer se presente ante la luz deslumbrante de los focos, ante todo el país, tienes que empezar con la presunción de que al menos la esencia de lo que habla es algo cierto», respondió.
El silencio del veterano político demócrata ha provocado suspicacias dentro de su propio partido, además de dar munición a sus rivales republicanos para atacar su honestidad e integridad.
El propio Donald Trump había aconsejado a Biden responder a esta alegación, pero con las prevenciones propias de una persona que fue acusada de conducta sexual inapropiada por unas 25 mujeres durante la campaña. «No sé nada sobre eso [las acusaciones contra Biden], pero creo que debería responder, ya sabes, podrían ser acusaciones falsas. Yo lo sé todo sobre acusaciones falsas, me han acusado falsamente en numerosas ocasiones», opinó recientemente Trump.
Reade hizo pública su denuncia en marzo en una entrevista en el pódcast de la periodista Katie Halper, en el que aseguró que los principales medios de comunicación habían ignorado sus intentos de sacar a la luz este caso, del que algunos allegados dicen haber tenido conocimiento desde hace años.
«Recuerdo que mientras lo hacía primero me dijo: ¿Quieres ir a algún lado? Y entonces, cuando lo rechacé: ‘Vamos hombre, he escuchado que te gusto’ (...) Esa frase se quedó conmigo», dijo la mujer en el programa.