En enero, López Obrador se negó a recibir en palacio a una marcha de víctimas de la violencia argumentando que eso sería facilitar el camino a sus opositores. Ahora, sin embargo, saluda a la madre del todopoderoso narco en una fecha señalada: el cumpleaños de Ovidio Guzmán, hijo del capo que fue arrestado en octubre en Culiacán y posteriormente liberado después de que sicarios del cartel tomasen el control de la ciudad.
El mandatario visitó las comunidades del denominado Triángulo Dorado, una de las principales zonas de producción de marihuana y amapola. En este área, bastión del cartel de Sinaloa —ahora dominado por los hijos del Chapo— confluyen los estados de Sinaloa, Chihuahua y Durango.