Biden promete que tendrá una vicepresidenta si llega a la Casa Blanca

Carlos Pérez Cruz WASHINGTON / E.LA VOZ

INTERNACIONAL

Joe Biden (izquierda) y Bernie Sanders (derecha) chocan el codo antes de su debate por la nominación demócrata a la Casa Blanca
Joe Biden (izquierda) y Bernie Sanders (derecha) chocan el codo antes de su debate por la nominación demócrata a la Casa Blanca KEVIN LAMARQUE | Reuters

Lanza su promesa en un debate con Bernie Sanders sin público a causa del coronavirus

16 mar 2020 . Actualizado a las 17:30 h.

Dada las circunstancias, será posiblemente lo único que trascienda del debate. El exvicepresidente Joe Biden se comprometió a que, si resulta elegido, optará por una mujer como candidata a la vicepresidencia. Preguntado al respecto, el senador Bernie Sanders dijo que en su caso también lo será «con toda probabilidad». Pero con un matiz: debe ser una mujer «progresista». Y ambos se comprometieron a apoyar a quien resulte elegido de estas primarias.

Hubiera parecido ciencia ficción hace menos de una semana: un debate en el que los dos contendientes discuten a la distancia recomendada por las autoridades sanitarias para evitar contagiarse el uno al otro y, además, celebrado sin público. Son las primarias demócratas en tiempos del coronavirus. Un cara a cara esterilizado. Sin el contacto ni el roce que da calor al debate. Frío. En un estudio de la CNN en Washington, frente a tres periodistas, y no en Arizona con simpatizantes, como estaba previsto inicialmente. La supresión de la cotidianidad por la emergencia sanitaria global no suspendió, sin embargo, un duelo que parecía fuera de contexto ante una situación de alarma como la que se vive en Estados Unidos y en gran parte del planeta.

Joe Biden y Bernie Sanders es lo que queda de lo que en inicio fue un plantel diverso y heterogéneo de candidatos. Dos hombres blancos y septuagenarios (el exvicepresidente tiene 77 años, el senador, 78), a los que se les recordó que forman parte del grupo de edad más vulnerable al impacto del coronavirus. De entrada, chocaron los codos a modo de saludo. Sanders aseguró que, por protección, «tengo mucho cuidado respecto a la gente con la que me estoy relacionando» y, por supuesto, «utilizo mucho jabón». Biden celebró que, «y toco madera», se encuentra «con buena salud». Ambos han suspendido los actos de campaña con público y ambos coinciden en sus críticas a la gestión que la Casa Blanca está haciendo de esta crisis, pero difieren en los detalles sobre cómo actuarían siendo presidentes.

Joe Biden puso el dedo en la llaga de uno de los motivos por los que Estados Unidos apenas ha podido realizar tests hasta la fecha. La Administración «rechazó» los ofrecidos por la OMS y, por ello, se ha perdido un tiempo precioso. Además, advirtió de que «el actual sistema no puede manejar el aluvión que es probable que se produzca», por lo que su consejo es que se planifique la creación de «hospitales temporales» para atender la demanda. Por ello, llamó a la movilización del Ejército. «Tiene la capacidad de construir hospitales de 500 camas y tiendas que son completamente seguras», garantizó el exvicepresidente.

Diferencias sobre la sanidad

En tiempos de crisis como estos, «la deficiencia del actual sistema sanitario», en palabras de Bernie Sanders, puede ayudar a dar impulso a su idea más popular: la de una sanidad pública universal (Medicare for All). Biden la rechazó de inmediato para defender que la solución está en atender la emergencia actual con un programa de contención y rescate económico, no con un sistema público de salud.

El segundo de Obama puso a Italia como ejemplo de país con sanidad pública. «No ha funcionado allí», apuntó. «Eso no resolvería el problema para nada». El senador señaló igualmente la necesidad de dar respuesta a la incertidumbre económica de quienes van a verse perjudicados por el cierre de sus negocios mientras dure la crisis.