El principal sindicato de Francia descarta suspender la huelga contra la reforma de las pensiones

La Voz

INTERNACIONAL

Mehdi Chebil

02 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El secretario general del sindicato francés Confederación General de Trabajadores (CGT), Philippe Martinez, rechazó que haya opciones de desconvocar la huelga general indefinida iniciada el pasado 5 de diciembre en protesta contra la reforma del sistema de pensiones y aprovechó para realizar un nuevo llamamiento a la población a sumarse a la protesta.

En concreto, se refirió al discurso de Año Nuevo del presidente francés, Emmanuel Macron, y le reprochó que no haya planteado «nada nuevo» más allá de los buenos deseos. Así, exigió la retirada del proyecto como paso previo para abrir una negociación, algo poco probable a la vista de la postura mostrada por el propio Macron hasta ahora. «Seguimos pidiendo que se pare este proyecto de reforma, su retirada, y trabajar seriamente para mejorar el sistema actual», afirmó Martinez en una entrevista.

Martinez defendió además reimpulsar la huelga, que hasta ahora afecta principalmente al transporte público, a partir de este lunes. «Desde el lunes llamamos a celebrar asambleas generales y discutir la movilización. Se necesitan huelgas en todas partes, en el sector público, en el privado», afirmó.

Uno de los objetivos del sindicato es lograr la paralización de las ocho refinerías de petróleo del país, pero negó que busquen evitar que los franceses trabajen si así lo quieren. «Llamamos a movilizarse, a manifestarse y a hacer huelga. A enfrentarse a un presidente de la República pagado de sí mismo y que cree que todo está bien en el país», argumentó. «Está encerrado en su burbuja. No hay manifestaciones, no hay chalecos amarillos, no hay huelgas, no hay pobreza,...», remachó. 

Acuerdo rápido

Macron aseguró en su discurso que llevará hasta el final su reforma de las pensiones e instó al Gobierno del primer ministro, Edouard Philippe, y a los agentes sociales a encontrar un «acuerdo rápido».

Macron no esquivó la crisis abierta por el proyecto para reformar el sistema de jubilación, aunque no dio pistas sobre la estrategia para la negociación.

«La calma debe primar sobre el enfrentamiento», dijo Macron, quien insistió en que a su juicio se trata de «un proyecto de justicia y progreso social, porque asegura la universalidad».