Miles de argelinos reciben con protestas la elección del sucesor de Buteflika

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

MOHAMED MESSARA | EFE

El ex primer ministro Tebboun se impuso en unos comicios con una abstención del 60 %

14 dic 2019 . Actualizado a las 09:40 h.

Miles de personas salieron ayer a la calles de Argelia para protestar contra los resultados de las elecciones presidenciales celebradas el jueves, las de menor participación de la historia del país, y reclamar por cuadragésimo tercer viernes una verdadera transición en el país. Al grito de «fuera Tebboun», los manifestantes recibieron la victoria del ex primer ministro con Buteflika Abdlemajid Tebboun, que se impuso con el 58,15 % de los votos en unos comicios en los que la abstención superó el 60 %.

«Lo que ayer pasó es un patraña. Venció el boicot y ganamos al demostrarles que no queremos sus votos. Esta es la verdadera opinión del pueblo argelino», resumió a Efe uno de los manifestantes, profesor de secundaria en un centro de la capital.

Abdlemajid Tebboun derrotó al candidato islamista moderado, Abdelkader Bengrina, que no contaba en los pronósticos, y que se quedó en un raquítico 17,38 %, por lo que no habrá segunda vuelta. La tercera posición correspondió al también ex primer ministro Alí Benflis con el 10,55 % de los sufragios. La tasa de participación fue del 39,83 %, en torno a diez puntos por debajo de la registrada en las presidenciales precedentes y la más baja de la historia de Argelia desde la independencia en 1962.

«Estos resultados son fruto de una mentira, de un nuevo fraude. Pero esta vez estamos de frente», advertía un estudiante miembro activo del Hirak, el movimiento popular que desde el 22 de febrero se manifiesta todas las semanas. Las protestas arrancaron para impedir que Buteflika aspirara a un quinto mandato, pero una vez que el presidente dimitió, forzado por la calle y por la presión del jefe del Ejército y nuevo hombre fuerte de país, el general Ahmed Gaïd Salah, han devenido en un desafío al régimen militar.

Las marchas se mantienen en todas las regiones del país cada martes y cada viernes, ahora con dos lemas principales: «Queremos un estado civil, no uno militar» y «Gaïd Salah, márchate, el pueblo es la soberanía y reclama libertad».

Un hombre del sistema que supone un cambio «para que nada cambie»

Nacido en 1945 en la localidad de Mechería (Naama, oeste), Tabboun, que se curtió en la política como gobernador en distintas provincias, llega con la etiqueta de ser un oficialista próximo al jefe del Ejército Gaïd Salah. Un hombre preparado para introducir los cambios que sean necesarios en la frágil economía argelina, sumida en una aguda crisis, «para que nada en el sistema realmente cambie», denuncia la oposición.

Ya lo intentó en mayo del 2017, cuando fue aupado a la jefatura del Gobierno en sustitución del ahora encarcelado por corrupción Abdelmalek Sellal con la idea de cambiar tendencias y levantar alfombras, pero no duró más de tres meses. Fue sustituido por Ahmed Ouyahia, el hombre más próximo al denominado clan Buteflika, igualmente condenado por corrupción. Una parte de las propuestas más controvertidas de Tebboun ya están recogidas en los presupuestos para el 2020.