Hugh Elliott: «Con un 'brexit' duro, el sector pesquero gallego sí se vería afectado»

Carlos Punzón
Carlos Punzón A TOXA / LA VOZ

INTERNACIONAL

Martina Miser

«No se pueden hacer referendos todos los años. La decisión está tomada», advierte el nuevo embajador del Reino Unido en España

05 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Recorrió parte de Galicia en bicicleta hace 35 años. Mejoró su español en Santiago y A Coruña y volvió después con su hijo a la espalda para seguir conociendo la tierra que visita con para participar en el Foro La Toja. Viendo ahora al mar desde la isla, el embajador del Reino Unido en España asegura comprender la inquietud del sector pesquero gallego ante un futuro incierto para sus redes en los caladeros británicos y Malvinas por un brexit, que, acordado o no, cambiará las relaciones en Europa. Hugh Elliott, que fue jefe de comunicación del departamento de su Gobierno para la salida de la UE, entiende que la salida de su país desata emociones, pero que al mismo tiempo fortalece la democracia de su país, mantiene.

-¿No hay vuelta atrás? Una parte de la sociedad europea pensó que la habría. ¿El no al brexit de 16,1 de millones de británicos no será tenido en cuenta?

-He sentido esa percepción al llegar a España de que el brexit se podría parar. Pero la decisión de celebrar el referendo no fue tomada a la ligera. La votación fue el mayor ejercicio democrático de la historia del Reino Unido por el número de personas que votaron. Y 17,4 millones votaron a favor de la salida. Hubo una decisión clara y la responsabilidad del Gobierno es implementar esa decisión. Ningún Gobierno podría ignorar la decisión de su pueblo, ni creer que se ha equivocado. Es una decisión ya tomada.

-¿No nace todo de un error de cálculo de David Cameron, pensando que habría otro resultado?

-Seguro que los académicos podrán estudiar eso durante años. La responsabilidad del Gobierno en el 2019 es llevar a cabo la decisión y tratar de llegar a un acuerdo consensuado con la UE, que es lo que todos queremos.

-¿Está de acuerdo con el brexit?

-Yo represento a mi Gobierno, y los embajadores no tenemos decisiones personales.

-¿Está Gran Bretaña preparada para caminar sin la UE y la UE para hacerlo sin Gran Bretaña? ¿Se está haciendo todo lo posible realmente por ordenar la salida?

-Sí, estamos preparados. Llevamos varios años trabajando en esto. Llegamos a un acuerdo de salida el año pasado y fue rechazado tres veces por el Parlamento británico y por eso estamos intentando renegociarlo, pero solo una parte pequeña de ese acuerdo, la gran mayoría está hablado, discutido y acordado y no es nuestra intención cambiarlo. Ese acuerdo contempla un período de transición hasta finales del 2020 para negociar un acuerdo futuro y eso nos da tiempo para acordar el resto.

-¿Los 1.700 gallegos que trabajan en barcos de pesca con bandera de su país y que el año pasado trajeron 7.000 toneladas de pesca tienen seguro su futuro?

-Galicia es para mí una zona especial a nivel personal. He venido de vacaciones con mi familia varias veces y tengo mucho aprecio a esta tierra. Entiendo las preocupaciones del sector pesquero, entiendo que es un sector muy importante para la economía gallega y que tenemos intereses comunes. Si llegamos a ese acuerdo consensuado tenemos tiempo después para negociar esa relación futura.

-¿Y si hay un brexit duro?

-Queremos ese acuerdo consensuado y trabajamos por ello. Trabajamos también en la contingencia de que no lo haya, claro porque es una responsabilidad y eventualidad posible. En ese caso sí que habría ciertos cambios inevitables que derivan del hecho de que seríamos un tercer país. Nosotros aplicaríamos cero aranceles en un 87 % de las líneas tarifarias, pero sí que habría tarifas en algunos sectores y el sector pesquero sí se vería afectado. Más razón aún para llegar al acuerdo consensuado que traería muchísimos beneficios.

-¿Qué pasaría con los trabajadores gallegos, los del resto de España, los extranjeros? Hay cosas pequeñas que conforman la vida de cada uno, como los carnés de conducir, las cuentas bancarias, permisos de trabajo...

-Entendemos que haya cierta preocupación pero mi mensaje es de tranquilidad porque con acuerdo o sin acuerdo, los ciudadanos españoles residentes en el Reino Unido, más de 150.000, no se verían afectados, sus derechos quedarían protegidos, el Gobierno británico lo garantiza, igual que el Gobierno español ha garantizado el respeto a los derechos de más de 300.000 británicos viviendo en España. Los españoles son nuestros vecinos, nuestros amigos y queremos que se queden con nosotros porque aportan muchísimo en todos los aspectos. Trabajamos para dar a conocer todos los pequeños trámites que hay que hacer para confirmar el estatus de los residentes en el Reino Unido. Y por si hay una salida sin acuerdo también damos mucha información para que los ciudadanos y las empresas se puedan preparar lo mejor posible.

-¿Lo ha hablado con el Gobierno español?

-Sí, y los dos países estamos convencidos de que hay que minimizar el impacto de esa eventualidad.

-Usted habla del ejercicio democrático que supuso el referendo de salida de Europa, ¿aceptaría su Gobierno que Escocia plantee un ejercicio igual para quedarse en la UE?

-Sí, ya lo ha hecho en el 2014. Tuvo la aprobación para su celebración por los Gobiernos de Londres y Edimburgo y se tomó la decisión de que ese referendo fuera una vez en una generación. Los referendos no se pueden hacer todos los años de forma aleatoria. El resultado fue muy claro a favor de la pertenencia dentro del Reino Unido. Además, yo no veo que esa sea una pregunta que esté en la calle y se vaya a reabrir.

-¿Usted aconsejaría al Gobierno de España que hiciese un referendo en Cataluña similar?

-Yo no pretendería aconsejar al Gobierno español en nada. No me corresponde como embajador. Tenemos excelentes relaciones con las autoridades nacionales y regionales. Nuestra posición frente al tema de Cataluña, la del Gobierno británico, es de muy claro de apoyo al Estado español y respetamos completamente los hechos constitucionales.

-¿Y cómo acabarán organizando sus relaciones con Irlanda?

-Nuestra propuesta de esta semana está pensada para desbloquear ese problema. Consiste en tres aspectos: respetar los acuerdos de Viernes Santo (de paz) y no restablecer una frontera dura, física entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda. Segundo, crear una zona única para bienes agrícolas e industriales que tendrían los mismos estándares, y en tercer lugar controles aduaneros en diferentes momentos de la cadena de suministros, no en la frontera. El caso de Irlanda es único y por eso proponemos una solución única y muy flexible.

-También única es la situación de Gibraltar, con 13.000 españoles trabajando allí, una amenaza encima y una frontera de nuevo en ciernes.

-Tenemos un interés compartido de asegurar la fluidez en esa frontera, tanto para los gibraltareños como para los españoles y esa zona de Andalucía que tanto depende de la actividad económica de Gibraltar.

-¿Cuánto ha descendido la calidad democrática de Gran Bretaña con el cierre del Parlamento que la Justicia consideró ilegal?

-En absoluto. Todo lo contrario. Lo que se ha visto es un ejercicio democrático y a las instituciones funcionando perfectamente. El legislativo, el ejecutivo y el judicial, cada uno funcionando en su papel.