Imputado un exministro de Defensa luso por el robo en un arsenal militar

Begoña Íñiguez LISBOA / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

Francois Lenoir | Reuters

A Azeredo Lopes se le acusa de prevariacación, abuso de poder y ocultación de datos

26 sep 2019 . Actualizado a las 18:08 h.

En plena campaña electoral en Portugal para las elecciones legislativas del 6 de octubre, José Alberto Azeredo Lopes, el exministro de Defensa del actual Gobierno luso, del socialista António Costa, ha sido imputado este jueves por la Fiscalía lusa por prevaricación, abuso de poder y ocultación de datos en la investigación de la Policía Judiciaria sobre el robo del arsenal militar de Tancos. La misteriosa sustracción de las armas, pertenecientes al Ejército portugués, se produjo en junio del 2017 en Tancos, en el centro del país, y su recuperación, que tuvo lugar el 18 de octubre del mismo año, a más de 100 kilómetros, causó mucha sospechas en la opinión pública portuguesa. Hace unos meses, cuando la investigación estaba ya avanzada, el extitular de Defensa se vio obligado a dimitir. La Fiscalía lusa ha inculpado junto a Azeredo Lopes a otras 22 personas, en su mayoría miembros del Ejército, como el exportavoz de la Policía Militar, y de la Guardia Nacional Republicana lusa (GNR).

La imputación de Azeredo Lopes ha entrado para quedarse en la campaña para las generales lusas, promete caldear las intervenciones de los principales candidatos y habrá que esperar hasta la noche del 6de octubre para saber si influye o no en los resultados electorales, ya que hasta el momento todas las encuestas sitúan al primer ministro Costa como gran favorito. Aun así, está lejos de la mayoría absoluta apuntada hace unas semanas en los sondeos, con nueve puntos de ventaja sobre el centrista Rui Rio, quien poco a poco va acortando distancia con Costa, que hace dos semanas era de casi 20 puntos porcentuales.

Costa se mantiene en silencio

Preguntado por los periodistas sobre la imputación de su exministro de Defensa, en una acción de campaña, el jefe del Gobierno portugués, se negó a responder: «Nunca comento este tipo de decisiones de la Fiscalía y mucho menos en campaña electoral».

Por su parte, el líder del PSD, Rui Rio, declaró: «Este es un caso muy grave que tiene que ser aclarado lo antes posible». La portavoz del democristiano CDS-PP, Assunção Cristas, fue más dura al acusar a Costa de «encubrir a criminales dentro del Gobierno».

Los aliados de António Costa en la denominada geringonça no tardaron en reaccionar. Catarina Martíns, del Bloco de Esquerda, aseguró: «Confiamos plenamente en la investigación de la Fiscalía y esperamos por el resultado final». Mientras que Jerónimo de Sousa, el secretario general del Partido Comunista luso, afirmó: «Nadie está por encima de la ley y de la Justicia». Y añadió: «Esta imputación no va a influir en los resultados del día 6».