Para el ex fiscal general Dominic Grieve, un prominente tory partidario de la permanencia en el UE, esta posibilidad «muestra el desprecio de Johnson por la Cámara de los Comunes [...]. Excluir al Parlamento de una crisis nacional que amenaza el futuro del país es totalmente erróneo».
Más humo negro
Entretanto, en la localidad francesa de Biarritz, donde este fin de semana se desarrolló la cumbre del G7, el premier británico se reunió con el presidente en funciones del Consejo Europeo, Donald Tusk, pero ambos solo acordaron volver a reunirse en un mes, para intentar llegar a un acuerdo que no incluya la polémica salvaguarda irlandesa.