Trump cumple su palabra y lanza una redada récord de inmigrantes en Misisipi

Carlos Pérez Cruz WASHINGTON / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) vigilan a los arrestos en un centro de procesamiento agrícola en Canton
Agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) vigilan a los arrestos en un centro de procesamiento agrícola en Canton US HOMELAND SECURITY / HANDOUT

La detención de 680 simpapeles deja desamparados  a decenas de menores

09 ago 2019 . Actualizado a las 10:03 h.

La mayor redada en un solo estado de la historia de Estados Unidos. Casualidad o no, se ha producido bajo la presidencia de Donald Trump. Casualidad o no, la noticia saltó mientras el presidente visitaba la ciudad de El Paso, en Texas, todavía impactada por el atentado del pasado sábado cometido, muy probablemente, por un supremacista blanco cuya retórica sobre los inmigrantes es similar a la de Trump. Sea como fuere, 680 personas fueron detenidas en siete plantas de procesamiento de productos agrícolas de seis ciudades del estado de Misisipi en una operación del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en sus siglas en inglés).

El director en funciones del ICE, Matthew Albence, explicó en rueda de prensa que algunos de los detenidos serán procesados por delitos, otros deportados de forma rápida y algunos puestos en libertad, de forma provisional, a la espera de sus citas ante los jueces que evalúan su situación legal en el país. El fiscal del distrito sur de Misisipi, Mike Hurst, apuntó también en dirección a las empresas «que utilizan inmigrantes ilegales para lograr una ventaja competitiva o para ganar dinero fácil».

Hurst advirtió que irán «a por ellos», aunque no aclaró si, más allá de los inmigrantes detenidos, la operación había apuntado contra algún responsable de las empresas afectadas. Precisamente desde organizaciones de apoyo a los inmigrantes se señala a menudo que uno de los factores que invitan a los extranjeros a entrar de forma irregular en Estados Unidos es la garantía de encontrar trabajo en empresas que rara vez son sancionadas por contratar irregulares. 

Menores sin padres

La masiva redada dejó virtualmente a decenas de niños sin techo, algunos de ellos bebés. En la localidad de Forest, el pueblo se organizó para dar cobijo en un gimnasio a varios de ellos durante la primera noche tras los arrestos. Amigos y vecinos de los detenidos se encargaron de recoger a los menores de sus casas y colegios para llevarlos hasta este centro, según informó un canal de televisión local.

«Muestre algo de corazón y libere a mis padres», clamaba Magdalena, de 11 años Entre los afectados se encontraba Magdalena Gómez, de once años, que no podía contener las lágrimas mientras pedía al Gobierno que mostrara «algo de corazón» y liberara a sus padres. «No dejen a los niños llorando», pedía desconsolada. «Necesito a mi padre y a mi madre», rogaba con la voz entrecortada.

Las detenciones han afectado a inmigrantes que llevan en Estados Unidos más de una década. Christina Peralta, madrina de dos niños cuya madre fue detenida en la operación, explicaba que la mujer arrestada «lleva aquí 15 años y no tiene ningún antecedente». Impotente, Peralta describía los llantos desconsolados de los pequeños. Uno de ellos le contaba que «está enfadado con Trump y que solo quiere que vuelva su madre».

Durante la rueda de prensa, un periodista le apuntó al fiscal Mike Hurst que probablemente estas industrias lleven contratando a inmigrantes irregulares durante años. «¿Por qué ahora?», le preguntó. «¿Tienes la sensación de que el presidente Trump te ha empujado a hacer esto?». Hurst, tajante, se limitó a contestar que «siento que se me ha empujado a hacer cumplir la ley».

El Congreso de EE.UU., incapaz de aprobar leyes para el control de las armas

 

C. P. C

El estreno en enero de la mayoría demócrata en la Cámara de Representantes devolvió el debate sobre el acceso a las armas al Congreso. Sin embargo, las iniciativas favorables a un mayor control mueren en la orilla de un Senado controlado por los republicanos.

En lo que llevamos de 2019, se han presentado 110 propuestas de ley (82 demócratas, 28 republicanas) que afrontan varios de los aspectos de la violencia con armas de fuego. Solo una de ellas ha sido aprobada y ni siquiera era específica sobre este tema. Fue la que puso fin al cierre de Gobierno más largo de la historia del país. Incluía una partida de 20 millones de dólares para «reducir los crímenes y la violencia de las pandillas».

En su mensaje desde la Casa Blanca sobre los dos tiroteos del fin de semana, Donald Trump se centró el lunes en los supuestos problemas de salud mental de los tiradores o en la «glorificación de la violencia» de los videojuegos, pero apenas citó de pasada el fortalecimiento de la revisión de antecedentes de los compradores. La Cámara Baja votó en febrero una ley destinada a obligar a estas revisiones en casi cualquier venta. Contó con 240 votos, de los cuales solo 8 fueron republicanos. El Senado ni siquiera ha admitido el tema a debate.

El tiroteo en un instituto de Parkland, Florida, que dejó en febrero del año pasado 17 fallecidos, fue el catalizador de algunas de las mayores manifestaciones que se recuerdan en el país en favor de un incremento del control del acceso a las armas. Con el telón de fondo del Capitolio, los alumnos del instituto soñaban con empujar al Congreso y al presidente a dar pasos en esa dirección. Su demostración de fuerza se ha probado impotente ante la parálisis de la política.

A esto se une las presiones de la Asociación Nacional del Rifle. La NRA ya ha advertido a Trump contra cualquier intento de aprobar la revisión de antecedentes para los compradores de armas.