El capo Rocco Morabito, que hasta su detención dirigía la mafia calabresa, estaba en prisión en Montevideo a la espera de ser extraditado a Italia
24 jun 2019 . Actualizado a las 21:27 h.El narcotraficante italiano Rocco Morabito, conocido como el rey de la cocaína de Milán, se ha fugado este lunes de la antigua Cárcel Central de Uruguay, en Montevídeo, donde estaba recluido a la espera de ser extraditado a Italia, según informa Europa Press.
Morabito se ha fugado junto a otros tres presos identificados como Leonardo Abel Sinopoli y Matías Sebastián Acosta, ambos requeridos por la Justicia brasileña, y Bruno Ezequiel Díaz, a quien buscan las autoridades argentinas.
Huida por la azotea
La fuga se ha producido en torno a la medianoche del Centro de Ingreso, Diagnóstico y Derivación de la antigua Cárcel Central. Han huido por la azotea y han saltado a un edificio cercano entrando en una casa donde han robado dinero.
El Ministerio de Interior uruguayo ha precisado que los cuatro estaban bajo «arresto administrativo» a la espera de que se resolvieran los procesos de extradición en curso. En el caso de Morabito, se le acusa de «tráfico internacional de drogas».
Las autoridades uruguayas han difundido su imagen y habilitado una línea telefónica para «aportar cualquier información que permita dar con su paradero bajo absoluta reserva».
Capo de la 'Ndrangheta
Morabito, de 52 años, está en la mira de la Justicia italiana desde 1994 porque se cree que desde 1988 y hasta ese año dirigió la mafia calabresa 'Ndrangheta. Fue condenado en ausencia a 30 de años de cárcel.
De acuerdo con El Observador, huyó primero a Brasil y acabó en Uruguay con una identidad falsa. En septiembre del 2017 fue detenido en Montevideo tras ser descubierto por inscribir a su hija con su nombre real en un colegio.
Reacción de Salvini en Twitter
El viceprimer ministro y ministro de Interior de Italia, Matteo Salvini, ha reaccionado en Twitter considerando «desconcertante y grave» que Morabito haya logrado escapar de prisión.
Salvini se ha comprometido a hacer dos cosas: primero, «pedir explicaciones inmediatas al Gobierno de Montevideo» y, segundo, «dar caza a Morabito, donde quiera que esté, para que acabe en la cárcel, como se merece».