EE.UU. batió en febrero el récord de detenidos en la frontera sur de los últimos 12 años

c.P.C. WASHINGTON / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kirstjen Nielsen, declaró ayer sobre las intenciones de la Administración del presidente Trump de construir un muro en la frontera con México ante el Comité de Seguridad Nacional del Capitolio
La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kirstjen Nielsen, declaró ayer sobre las intenciones de la Administración del presidente Trump de construir un muro en la frontera con México ante el Comité de Seguridad Nacional del Capitolio JIM LO SCALZO | EFE

El mes pasado 76.000 personas fueron arrestadas, muchas de ellas «unidades familiares»

07 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Ni las políticas antiinmigratorias de la administración estadounidense ni la retórica criminalizadora de Donald Trump suponen un freno para la llegada a la frontera entre México y EE.UU. de miles de personas que huyen especialmente de Honduras, El Salvador y Guatemala. En febrero, el número de detenidos en la frontera sur duplicó las estadísticas del mismo mes del 2018: 76.000 personas fueron arrestadas, lo que supone la cifra más alta para este mes en doce años, muchas de ellas «unidades familiares».

Esa es la gran diferencia con respecto a los momentos de mayor presión migratoria que vivió EE.UU. a comienzos de los 2000, cuando las detenciones en la frontera llegaron a alcanzar 1,6 millones de personas. Entonces la migración se componía fundamentalmente de hombres solos, y ahora son en muchos casos familias, hasta el punto de que entre octubre y febrero, los agentes aseguran haber arrestado a 136.150 individuos viajando en familia, más que en todo el año fiscal anterior, que finalizó en septiembre.

En una tensa comparecencia ayer ante un comité de la Cámara de Representantes, la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, anunció que se va a extender a toda la frontera sur la práctica de devolver a México a los solicitantes de asilo mientras se gestiona su petición, que puede durar años, algo que la administración Trump empezó a practicar hace unas semanas en la frontera entre San Diego y Tijuana. Además, anunció que el Gobierno va a firmar este mes un acuerdo con Nicaragua, El Salvador y Honduras para intentar evitar la salida de caravanas migrantes.