El laborista obtiene la peor valoración de la historia del partido desde Foot en 1982
09 feb 2019 . Actualizado a las 17:21 h.Solo uno de cada cinco británicos confía en Jeremy Corbyn para superar el brexit. El liderazgo del jefe de la oposición se ha desplomado a sus peores niveles, mientras el Partido Laborista vive bajo la amenaza de escisiones entre los que ven con buenos ojos sus cinco propuestas a la primera ministra para apoyar la salida del bloque común y los que creen que el partido debería estar al frente de una campaña para un segundo referendo.
La popularidad del líder laborista, tanto entre el público general como entre sus votantes, ha disminuido las últimas semanas, según reveló un sondeo del Evening Standard. Solo una quinta parte de los encuestados creen que Corbyn pone en primer lugar el interés nacional en la negociación del brexit.
La puntuación de satisfacción neta de Corbyn es de menos del 55 %, solo comparable con los peores días de Michael Foot, considerado como el peor líder de la historia del partido de Corbyn, bajo cuyo mandato los laboristas sufrieron una derrota histórica frente a Margaret Thatcher en 1983.
La proporción de británicos satisfechos con el trabajo de Corbyn se desplomó del 27 % al 17 %, la cifra más baja registrada por los líderes laboristas, solo rebasada por el citado Foot, quien cayó al 13 % en 1982. Por el contrario, la proporción que está insatisfecha con Corbyn aumentó desde diciembre hasta febrero del 59 al 72 %. Lo más preocupante para él es que solo el 20 % de los encuestados confían en Corbyn para tomar las decisiones correctas sobre Europa. Dentro de los votantes laboristas, un 44 % están contentos con él, mientras que May aún disfruta de una calificación positiva del 34 % entre los votantes conservadores.
May busca apoyo en Irlanda
La jornada de ayer estuvo marcada por las reuniones entre británicos e irlandeses sobre el brexit. May se reunió en Dublín, con su homólogo irlandés, Leo Varadkar, quien a su vez se vio antes con los principales partidos de Irlanda del Norte en Belfast.
Mientras, el Gobierno británico comenzó a reclutar civiles para trabajar en un centro de control de emergencia que se está creando para garantizar que el Reino Unido funcione sin problemas en el caso de un brexit sin acuerdo. Según el Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales, el Centro de Emergencias para la Salida de la UE podría permanecer abierto «durante dos años».
