El Gobierno de May augura «un desastre» si rechazan su plan

RITA Á. TUDELA LONDRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Un grupo de músicos proUE da un concierto ante las puertas del Parlamento británico
Un grupo de músicos proUE da un concierto ante las puertas del Parlamento británico ADRIAN DENNIS | AFP

Bancos y empresas presionan para aplazar el «brexit» y aumentan los partidarios de un nuevo referendo

11 ene 2019 . Actualizado a las 08:18 h.

Un brexit sin acuerdo tendría que ser retirado de la mesa y los parlamentarios deberían al mismo tiempo acordar un paquete de compromisos para detener la «alarma creciente» de las compañías internacionales, recomendó el titular británico de Negocios, Greg Clark. Considerado uno de los ministros más poderosos del Gobierno de Theresa May, Clark reconoció que las empresas están ahora desviando cientos de millones de libras a la planificación de un escenario de salida del Reino Unido de la Unión Europea sin acuerdo.

«No podemos seguir así», advirtió antes de fijar el fin del mes como fecha límite para encontrar un compromiso. En esa línea, pidió a los diputados que «se muevan rápidamente y actúen de manera responsable para establecer qué apoyarán y qué no».

Clark reconoció que es «cada vez más obvio» que una mayoría «sustancial» de diputados bloqueará un brexit sin acuerdo. Predijo que este escenario solo causaría un «daño incalculable» en las industrias británicas. «Sería una catástrofe», insistió.

Durante su intervención parlamentaria, el ministro de Medio Ambiente, Michael Gove, enfatizó como incluso los partidarios del mismo «reconocen que tiene sus imperfecciones». Gove dijo que los más de 600 parlamentarios tienen puntos de vista «diferentes y superpuestos» sobre cómo se debe manejar el brexit.

Pero el rechazo a la hoja de ruta de May es global. Este jueves, un exdirector del MI6 y un exjefe del Ejército lideraban un manifiesto de históricos del Partido Conservador euroescépticos que denunciaban que el divorcio de Bruselas «pone en peligro la seguridad nacional». Al Parlamento de Westminster llegaron más de 650.000 firmas para exigir el brexit duro en cumplimiento del mandato del referendo, mientras que los europeístas han reunido más de cien mil apoyos en unas horas para exigir una nueva votación.

El titular de Medio Ambiente criticó el enfoque laborista para el divorcio, alegando que el partido ha presentado 16 alternativas diferentes en la Cámara de los Comunes. De hecho, les acusó de «perseguir todo un carnaval de unicornios a través de la llanura europea, ninguno de los cuales es capaz de ser entregado».

Corbyn y las elecciones

Desde las filas laboristas, Jeremy Corbyn repitió su demanda a May para que convoque elecciones lo antes posible para «romper el punto muerto» en el que están en la actualidad las negociaciones. Para Corbyn, está claro que si la líder conservadora tuviese confianza en su plan, convocaría los comicios generales y dejaría decidir a los británicos. Y, como no tiene esa confianza, «es necesario un nuevo Gobierno que tenga un campo de acción más abierto» para poder negociar nuevas condiciones con los responsables de Bruselas.

Un sector cada vez más amplio de su partido quiere ir más allá y apoya la tesis de exigir un nuevo referendo ante el avance de los partidarios de seguir en la UE como revelan las últimas encuestas. Bancos y grandes empresas lideran esa campaña de movilización ciudadana a favor del remain. Ajeno a esa demanda por ahora, Corbyn criticó el efecto que tendrá el plan del brexit de la primera ministra en los derechos de los trabajadores y dice que quedarán por detrás de los estándares de la UE.

Mientras, la primera ministra trata de tender nuevos puentes y acuerdos comerciales con Japón. Durante su reunión con el primer ministro japonés, Shinzo Abe, en Downing Street en busca de nuevas alianzas comerciales y para intentar digerir la cascada de derrotas parlamentarias que acumula desde el martes.