La justicia alemana busca a 500 neonazis prófugos

patricia baelo BERLÍN / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

FILIP SINGER | EFE

La cifra de ataques contra refugiados y sus albergues solo ha ido disminuyendo a medida que caía el número de llegadas al país

05 dic 2018 . Actualizado a las 08:03 h.

La crisis migratoria de 2015 no solo ha provocado un viraje a la derecha de la población en Alemania sino también un considerable repunte de la violencia xenófoba. La cifra de ataques contra refugiados y sus albergues solo ha ido disminuyendo a medida que caía el número de llegadas al país debido al pacto con Turquía, las deportaciones forzosas y el cierre parcial de la ruta de los Balcanes. Hasta la primera mitad del año se registraron 704 agresiones de este tipo, frente a las 1.227 del mismo período del año anterior, y las 2.259 de 2016. La gran mayoría son perpetradas por ultraderechistas reincidentes.

Pese a que las autoridades son conscientes de ello, a día de hoy un total de 467 neonazis son considerados prófugos de la justicia alemana, según la respuesta del Gobierno a una pregunta del grupo parlamentario La Izquierda difundida ayer. De acuerdo al diario Neue Osnabrücker Zeitung, 108 de esos extremistas de derechas están acusados de delitos con trasfondo político, tales como incitación al odio racial, negación del Holocausto o empleo de símbolos nazis. En 99 de los casos la orden de detención se debe a episodios violentos, y en el resto a infracciones de diversa índole.

«Los organismos de seguridad tienen que hacer algo para arrestar a los ultras prófugos», instó la diputada izquierdista Ulla Jepke en declaraciones al rotativo. Pero las autoridades no lo tienen fácil. Por un lado, sufren por la falta de personal en casi todos los estados federados, mientras el número de criminales reclamados se ha duplicado desde 2014. Por otro, se enfrentan al hecho de que 32 de los 467 prófugos han huido al extranjero, la mayoría a países vecinos.

Entretanto, el partido ultra AfD, que se coronó como el tercero más votado en las elecciones de 2017 tras capitalizar el creciente rechazo a la llegada de refugiados, arremete contra los artistas. El presidente de la formación tachaba ayer de «repudiable uso de métodos nazis» la iniciativa de un colectivo, que persigue desenmascarar a los que participaron en las marchas xenófobas desatadas el pasado agosto en la ciudad de Chemnitz, a raíz de la muerte de un alemán presuntamente a manos de extranjeros.

«El grupo Centro para la Belleza Política, ZPS, ha llamado a denunciar a los manifestantes para acabar con su existencia económica», criticó Alexander Gauland, el mismo día en que su partido expulsaba a la líder regional del land de Schleswig-Holstein por sus vínculos con una organización negacionista del Holocausto.

El ZPS, famoso por sus acciones contra la ultraderecha, activó el lunes la web Soko Chemnitz, que incluye los perfiles de unos 1.500 participantes en las protestas de la localidad del este alemán. Una suerte de catálogo con su nombre, foto y currículo. El objetivo es que las empresas para las que trabajan conozcan la ideología de sus empleados.

Está claro que el mundo del arte no piensa ceder ante el auge ultra. Otro colectivo, Modus, colocó enfrente de la sede berlinesa del partido un cartel con el logo de Coca-Cola acompañado de Papa Noel y el lema: «Para unas Navidades felices, di no a AfD». La acción, que ha desencadenado una avalancha de reacciones en las redes sociales, se enmarca en los planes de Modus de llevar a cabo una iniciativa artística contra la formación de extrema derecha cada día desde el 1 hasta el 24 de diciembre.